El Debate sobre el Estado de la Región celebrado el pasado jueves y viernes en las Cortes de Castilla-La Mancha quedó marcada por la inesperada revelación del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que aseguró haber sido objeto de una investigación impulsada por un subdelegado del Gobierno en Castilla-La Mancha. Unas palabras que abrieron una brecha de tensión entre el Ejecutivo regional y el Gobierno central, ambos del mismo partido.
García-Page, durante el debate, volvió a sacar pecho de su bandera de "corrupción cero" y de la transparencia de su Gobierno. En ese contexto, lanzó la afirmación que desató el asombro en las Cortes.
"Hemos tenido a un subdelegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, del Gobierno de hoy, buscando y escarbando a ver si encontraba cosas sucias de este presidente", dijo el dirigente socialista, calificando lo sucedido como "un hecho serio por no decir grave".
Este lunes, la delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, ha intentado apagar el fuego con una declaración escueta pero firme. Preguntada por los medios durante la presentación de la II Carrera Solidaria Ruta 091, Tolón ha asegurado que "no le consta" que ninguna Subdelegación del Gobierno haya "investigado a nadie", desmarcándose de la acusación implícita que lanzó Page durante su intervención parlamentaria.
La actual delegada ha salido al paso defendiendo el trabajo de los representantes estatales en la región, destacando “el magnífico trabajo que hacen los subdelegados del Gobierno, no solamente de Castilla-La Mancha sino de toda España”, especialmente en momentos “difíciles”. Tolón ha querido además mostrar su respeto hacia el jefe del Ejecutivo autonómico: “No creo que nadie pueda cuestionar su honradez después de tantos años”, ha subrayado.
Según fuentes socialistas, el propio García-Page habría tenido conocimiento de los hechos hace más de un año y medio, tras ser advertido de que algunas personas estaban siendo contactadas para recabar información con el objetivo de perjudicarle políticamente. Desde el entorno del presidente se ha optado por no alimentar más la polémica, limitándose a confirmar la existencia de esas advertencias sin intención de elevar el caso a una denuncia formal.
Mientras tanto, varias Subdelegaciones del Gobierno en Castilla-La Mancha se han remitido a las palabras de Tolón, alineándose con la versión oficial: no hay constancia de ningún tipo de investigación o seguimiento interno.