A propósito de la implantación del veto parental en las escuelas andaluzas, Vox no confía en el consejero de Educación, Javier Imbroda, pero sí en el presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno.

El portavoz de la formación ultra en el Parlamento, Alejandro Hernández, ha apelado hoy a "la palabra del presidente" de la Junta ante el Pleno del Parlamento, cuando “se comprometió a dar cumplimiento a lo suscrito y a realizar los cambios normativos necesarios para que esa autorización de los padres para realización por parte de sus hijos de determinadas actividades complementarias sea una realidad y la podamos ver negro sobre blanco" en este primer semestre del año.

Moreno, Marin, Imbroda

El presidente andaluz, en efecto, mencionó expresamente en el Pleno de la semana pasada y en una entrevista radiofónica su coincidencia con Vox en dar a los padres la potestad de “autorizar o no” la participación de sus hijos en determinadas “actividades complementarias”.

Moreno enfatizó la palabra “complementarias” para dar a entender que la autorización parental afectaría a contenidos escolares de poca relevancia. El presidente parecía confundir las actividades complementarias con las denominadas actividades extraescolares, que no forman parte del plan de enseñanza de los centros. De hecho, lo que Vox pretende en Andalucía ya lo intentó en Murcia el curso pasado, pero los tribunales suspendieron la medida.

La opinión del consejero de Educación Javier Imbroda, y la del propio vicepresidente de la Junta y líder andaluz de Cs, Juan Marín, es bien distinta. Ambos han subrayado en distintas comparecencias que el pin parental no se implantará en Andalucía. Imbroda en ningún momento ha hablado de que los padres autoricen dichas actividades, solo de que estén puntualmente informados de las mismas.

"Derecho a decidir"

Sin embargo, en el reciente acuerdo alcanzado por Imbroda con Vox, y cuya implementación exige el grupo ultra, ambas partes se comprometían a implantar en las escuelas andaluzas "el establecimiento de un sistema transparente de información a los padres a través del cual se impulse […] el derecho de los padres a decidir sobre la participación de sus hijos en actividades complementarias”.

La frase “derecho a decidir de los padres sobre la participación de sus hijos” parece ir mucho más de lejos de lo que Imbroda dice estar dispuesto a ir e incluso más lejos de lo que sugiere haber firmado él mismo. A ella se agarra, en cambio, Vox como a un clavo ardiendo para exigir que se cumpla lo acordado.

Hernández ha informado hoy en rueda de prensa de que este viernes su grupo mantendrá una reunión "a nivel técnico" con la Consejería de Educación y Deportes, de la que esperan que salga un calendario para la implantación en Andalucía de lo que llaman el "pin parental".

El portavoz de la extrema derecha andaluza ha manifestado además que se reitera en su posición, anunciada en el Pleno del Parlamento de la pasada semana, de no apoyar ninguna iniciativa del Gobierno o de los partidos que lo sustentan, PP-A y Ciudadanos, hasta que se implante el "pin parental".

Ha insistido en lamentar que el consejero de Educación y Deporte, Javier Imbroda, haya hecho un anuncio expreso de "no cumplir" con el acuerdo de Vox sobre el llamado "pin parental" como si su consejería fuera un "ente independiente" del Gobierno andaluz.

Un arma para los antitaurinos

El portavoz ha confiado, según informa Europa Press, en que en la reunión del viernes con Educación se les traslade una calendarización para la implantación de esa "autorización" de los padres en relación con la participación de sus hijos en actividades complementarias, con "independencia de como se quiera llamar". "No vamos a hacer cuestión de la semántica, lo que nos importa es el contenido y que los padres puedan acogerse a ese derecho", ha apuntado.

Según ha explicado Hernández, lo que ellos han venido llamado "pin parental" consiste en que los padres tengan la posibilidad de no autorizar la participación de sus hijos en una actividad complementaria si consideran que puede ser "perjudicial" para su educación. Ha apuntado que este mecanismo también lo puede utilizar un padre que no quiera que su hijo vaya a una charla sobre la "tauromaquia o la caza".

Asimismo, el portavoz parlamentario ha señalado que si con la actual legislación no es posible implantar esto, por eso plantean que se lleven a cabo los cambios normativos que sean necesarios y de los que "también habló" el presidente de la Junta. "Esa capacidad la tienen que tener los padres y está puesto negro sobre blanco en los pactos presupuestarios y en el acuerdo firmado con Imbroda", según ha recalcado Alejandro Hernández.