Rectificación provisional pero inequívoca de la Mesa del Parlamento. La expulsión exprés, la semana pasada, de ocho diputados de Adelante Andalucía queda congelada desde ayer hasta que, en el plazo de dos días naturales, Izquierda Unida "acredite que los ocho diputados afectados han causado baja en el grupo parlamentario como consecuencia de su baja” en Podemos.

Antes de acudir al Tribunal Constitucional u otras instancias judiciales, los expulsados habían interpuesto un recurso ante la propia Mesa, que ha estimado parcialmente los argumentos de los recurrentes. Estos exigían que se rechazara el escrito solicitando la expulsión, pero finalmente la Mesa optó por dejarlo “sin efecto”.

Los ocho parlamentarios quedan provisionalmente readmitidos como miembros de Adelante. Lo que está en juego no es únicamente la política, sino también la economía: quedar fuera de Adelante significa quedarse sin la asignación del Parlamento proporcional a los escaños de cada grupo.

Adelante percibe 1,6 millones de euros anuales por sus 17 diputados: en el caso de perder a Rodríguez y los suyos, cobraría únicamente por 11, no por 17, pero los 'odiosos ocho' saldrían mucho peor parados porque percibirían solo su sueldo. Precisamente una de las causas de fondo de la ruptura era el reparto y el destino de los fondos, administrados por Rodríguez.

Una decisión difícil

Han sido necesarias dos largas reuniones de la Mesa, la del miércoles y la de ayer jueves, para que el Partido Popular reconsiderara su posición de hace ocho días, cuando sumó sus votos a PSOE y Vox apoyando la solicitud de expulsión de los diputados presentada por la portavoz de Adelante, Inmaculada Nieto.

Estos dos últimos partidos siguen mostrándose favorables a la expulsión, pero esta queda en suspenso tras rectificar el PP y atender la propuesta del letrado mayor de la Cámara, Ángel Marrero, de pedir a Nieto que documente acusación de transfuguismo por la que solicitó la expulsión.

Cuando la diputada de IU presente las pruebas exigidas, estas serán evaluadas por los letrados de la Cámara, que emitirán el informe que servirá de base a la Mesa para adoptar su decisión definitiva.

¿Existen las pruebas?

Rodríguez se apresuró anoche a publicar en su cuenta de Twitter su satisfacción: "La Mesa del Parlamento –escribía– anula nuestra expulsión con beligerancia abierta de PSOE y Vox. Le piden a Inmaculada Nieto (IU) documentos que no podrá aportar porque no existen, como el que avala la expulsión del Grupo Parlamentario donde están en franca minoría".

Por su parte, Inmaculada Nieto remitió a los medios una declaración con este mensaje: "Vamos a poner esa documentación y la que se nos requiera a disposición de la Mesa, y esperamos que en los próximos días haya ya una decisión definitiva que restituya la normalidad del funcionamiento de la Cámara y acompase el proceder de las formaciones políticas que trabajamos en ella a lo que ya hemos acordado con respecto al transfuguismo a nivel estatal".

Los expulsados argumentaban indefensión y violación de sus derechos como parlamentarios y advertían de que si la Mesa “castiga por sus ideas a los ocho diputados expulsados, se dará la paradoja de que gozaremos de inmunidad fuera de la Cámara por las opiniones públicas que expresemos, pero estaremos perseguidos dentro del Parlamento".

Firmaban el recurso Teresa Rodríguez, los hasta ahora portavoces adjuntos de Adelante, Ángela Aguilera y José Ignacio García, así como a los parlamentarios Luz Marina Dorado, María Vanessa García, María Gracia González, Nacho Molina y Diego Crespo.