La gestión durante los últimos cuatro años de la Comisión Ejecutiva Regional de UGT-A, liderada por Carmen Castilla, ha obtenido el respaldo del 97,86 por ciento de los votos de los delegados del congreso del sindicato, logrando 229 votos a favor, ningún voto en contra y cinco abstenciones. En el cónclave participan 271 delegados de toda la Comunidad en representación de los 150.000 afiliados con los que cuenta la organización. Por el momento la única persona que ha presentado candidatura a la Secretaría General es la actual máxima responsable del sindicato en Andalucía, Carmen Castilla, que optará a la reelecciónEl informe de gestión de la Comisión Ejecutiva Regional de UGT-A, correspondiente al periodo 2013-2016, ha obtenido así un respaldo del 97,86 por ciento durante la primera jornada del 11 Congreso Ordinario del sindicato. Según indica UGT-A en una nota, también se ha votado, a mano alzada, la gestión de la Comisión de Control Económico y la del Comité Regional, aprobadas ambas por unanimidad.Una vez concluido el debate y la votación del informe de gestión, la Comisión Ejecutiva Regional queda disuelta y se abre el plazo de presentación de candidaturas, que concluirá en el segundo día de congreso.Las federaciones de UGT-A que se mostraron partidarias en el último congreso de UGT Confederal de Miguel Ángel Cilleros pidieron hace varias semanas una candidatura de "consenso" de cara al congreso de UGT-A, ante lo que entonces apuntaron que "si no se integran a todas las sensibilidades" estudiarían presentar una candidatura alternativa, aunque por el momento no se han vuelto a pronunciar en ese sentido.Durante la segunda jornada, los delegados se distribuirán en tres comisiones de trabajo que analizarán las diferentes enmiendas presentadas al programa de acción, al programa fundamental y a los estatutos y normativa interna de la organización sindical.DEFENSA DE LA CONCERTACIÓNLa secretaria general de UGT-A, Carmen Castilla, ha defendido la "fortaleza" del sindicato y ha apelado a la "honestidad y a la honorabilidad" de la central sindical, apostando por la unidad de acción sindical y la transparencia de su sindicato, así como la necesidad de recuperar el diálogo social frente a la "demonización" de la Concertación Social.En su discurso de inauguración del 11 Congreso Ordinario de UGT-A, Castilla ha apelado a la unidad de todo el sindicato, de forma que "si estamos juntos, nadie podrá con nosotros" y ha recordado que "han sido años duros" en los que "los trabajadores están con nosotros y confían en un sindicato centenario".Tras agradecer a su Ejecutiva, a los que definió como "pandilla con la que vivimos momentos de risas y dificultades, con los que te tomabas una Cruzcampo o compartías paquetes de pañuelos", a los delegados sindicales y a los trabajadores por su apoyo y trabajo, Castilla ha asegurado que el sindicato "ha estado en las empresas y no ha dejado atrás a ningún sector".Ha asegurado que el sindicato "está fuerte, con alta representatividad y con muchos afiliados, con 25.0000 altas nuevas en los últimos dos años", de forma que asegura que UGT-A "está más viva que nunca, con mucha ilusión y muchas ganas de hacer cosas", por lo que ha defendido "las siglas de UGT-A" y ha pedido a los presentes que "nadie os cuente milongas", reiterando su petición de unidad.Castilla, quien asegura que en esos 819 días que lleva al frente del sindicato no se arrepiente de su decisión, ha recordado la decisión "muy madura y muy responsable" de la organización, que fue "muy valiente al elegir a una persona sin experiencia sindical, pero que tras dos años y tres meses muy complicados he hecho un máster y una carrera".Lamenta que los trabajadores "llevan nueve años pagando los efectos de la crisis", de forma que "ahora dicen que ha subido el PIB, pero los salarios no han subido, siguen pasando penalidades y tienen trabajos precarios, el empleo que se crea es precario", por lo que insiste en luchar por un cambio de modelo productivo.Asimismo, ha defendido la labor de los sindicatos de clase e insiste en la unidad de acción sindical junto a CCOO-A y también apuesta por recuperar la negociación colectiva, puesto que "a empresarios y sindicatos nos interesa la calidad de vida de los trabajadores". "Nos debemos unir y hacer piña para recuperar el diálogo social, al que no vamos a renunciar porque haya gente a la que no le interese que salga la palabra demonizada de concertación social", ha aseverado.Aboga por luchar contra la brecha salarial entre ricos y pobres y hombres y mujeres y ha recordado el potencial de Andalucía "que está sufriendo peor que nadie los efectos de la crisis, con más tasa de desempleo, de desigualdad y una tasa de pobreza del 42 por ciento, y con alto numero de desahucios", apostando por "crear empleo de calidad y con valor añadido".RETOSEntre los retos, Castilla ha apostado por "mayor transparencia en la gestión", sobre la que recordó que el sindicato en Andalucía ya se adelantó a la aplicación de la Ley de Transparencia, publicando sus cuentas en la web, puesto que "no tenemos nada que ocultar", aunque no ha aludido a las investigaciones judiciales y administrativas que existen sobre el sindicato.También apuesta por más participación de los delegados, reducir la estructura y estar mas cerca de las secciones sindicales, reforzando la acción sindical. El sindicato luchará para recuperar el poder adquisitivo de los salarios", reclamará un plan integral de empleo y reforzará la lucha para la prevención de riesgos laborales.PALABRAS DE CCOO Y CEAEl secretario general de CCOO-A, Francisco Carbonero, quien lamenta que "la brecha social se ha acrecentado y la pobreza laboral es una realidad, pues los sistemas de protección se han debilitado y son insuficientes", ha lamentado que el modelo productivo actual "es incapaz de generar empleo y que éste sea de calidad".Tras apuntar que la crisis "se ha acrecentado por la ideología imperante en la UE y se ha amplificado por el Gobierno del PP", ha defendido el papel de los sindicatos de clase "que siempre fuimos el motor de cambio para conseguir derechos y avances muy importantes para los trabajadores".Apunta que a pesar de ello, "se ha iniciado una gran campaña contra el sindicalismo de clase", donde "el discurso dominante ha querido debilitarnos e invisibilizarnos y erradicarnos, pero a los que nos quieren hundir les ha fallado algo, y es que nosotros estamos en el diario, con los trabajadores, en las empresas, negociamos los convenios, impedimos los despidos; la gente sabe bien lo que hacemos y los trabajadores nos han dado su legitimidad".Ha recordado que "las dos fuerzas sindicales, UGT y CCOO, son hegemónicas entre los trabajadores andaluces, les pese a quien les pese, y defienden los derechos de los trabajadores, que saben que nuestro trabajo es útil y que somos la esperanza de mucha gente que lo pasa mal".Por ello, insiste en potenciar la unidad de acción, que "es la fuerza de los trabajadores" y considera que los sindicatos "somos ejemplo de cómo ser capaces, teniendo posiciones distintas, de ponernos a trabajar en defensa común de los trabajadores, la política podría aprender de nosotros". "Tenemos que estar por encima de cada organización para buscar el bienestar de la gente, trabajar por la justicia social y por más dignidad", ha añadido.Carbonero asimismo espera que se forme Gobierno y confía en que "haya suerte" pues "este país decidió un día que necesitaba un giro social", por lo que "es importantísimo que haya un Gobierno que tome determinadas medidas que corrija la agresión tremenda que hemos sufrido".También ha abogado por recuperar el diálogo social "al que no vamos a renunciar, sea el Gobierno que sea, guste más o menos", de forma que "trabajaremos conjuntamente para sacar a Andalucía de la dificultad y la desigualdad".Por su parte, el presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Javier González de Lara, ha recordado que los objetivos de la CEA "no son exclusivos sino compartidos entre sindicatos y empresarios". Así, ha destacado que ambas partes "luchar por la creación de más y mejor empleo y perseguir un incremento de la actividad productiva", recordando mecanismos como el dialogo social, que "hay que recuperar, pues ha dado excelentes frutos, aunque algunos lo cuestionen hoy", y la Ley de Participación Institucional, que reclaman los agentes en Andalucía para "dotar de transparencia, certidumbre y prestigio la labor de organizaciones empresariales y sindicales".Ha apostado por tanto por "los esfuerzos por el diálogo de la manera eficiente y responsable, buscando la paz social, algo que hay que cultivar". "Muchas cosas nos unen, la empresa como objeto global y común, más y mejor empleo, más y mejor empresa, y más actividad económica", ha agregado González de Lara.REESTRUCTURACIÓN SINDICALEl secretario de Organización de UGT, Rafael Espartero, y el secretario general de FSP UGT, Julio Lacuerda, aludieron a los últimos cambios registrados en el congreso confederal, donde se abordó la reestructuración del sindicato, que pasará a tener de seis federaciones a tres, algo que se culminará en mayo; además de apostar por mayor importancia de las secciones y delegados sindicales, fortalecer la negociación colectiva, y buscar la legitimación del sindicato para pronunciarse sobre las políticas sociales y económicas.A la inauguración del congreso ha acudido la presidenta de la Junta, Susana Díaz, cuatro consejeros del Ejecutivo andaluz, el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, la secretaria general del PP-A, Dolores López, la presidenta del PSOE, Micaela Navarro, o el secretario de Organización del PSOE-A, Juan Cornejo, además de diversos alcaldes e instituciones.PALABRAS DE LA PRESIDENTALa presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha insistido este jueves en pedir la derogación de la reforma laboral estatal y ha anunciado que mantiene como principal reto recuperar los derechos de los empleados públicos.En su intervención en la inauguración del 11 congreso de UGT-A, la presidenta de la Junta ha valorado que es "un momento muy importante para Andalucía", toda vez que "en los inicios era muy difícil ser sindicalista, pero ahora es mas complejo, sobre todo cuando se pone demasiado en cuestión el papel de los sindicatos".De esta forma, ha considerado que, si los sindicatos "siempre fueron necesarios, ahora se han convertido en imprescindibles", cuando "el primer reto colectivo es recuperar los derechos perdidos con la crisis económica devastadora" y "conseguir la derogación completa de una reforma laboral infame que ha precarizado el empleo en este país".Susana Díaz, quien ha acudido al congreso acompañada por el vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios, y por cuatro consejeros, los de Economía y Conocimiento, Antonio Ramírez de Arellano, el consejero de Empleo, Empresa y Comercio, José Sánchez Maldonado, la consejera de Igualdad y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, y la consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, ha abogado por "dar dignidad a las personas con un empleo digno, con salarios dignos, que permita sacar a las familias adelante" y por recuperar la negociación colectiva.Ha dedicado especialmente parte de su discurso a los empleados públicos y ha apuntado que, si hay visos de recuperación económica, esto es una oportunidad para recuperar derechos y también para mantener el sector público"."Debe recibir quien peor lo ha pasado y deben recuperar derechos los empleados públicos", ha aseverado Díaz, quien ha recordado el acuerdo suscrito con los sindicatos el pasado verano sobre los empleados públicos y, según ha subrayado, va a "cumplir, con la recuperación de la jornada y de salarios, aunque quedan muchas cosas que recuperar".Así, ha apuntado que su primer reto en ese sentido es "recuperar los derechos de los trabajadores públicos, pues con ello se ayuda a recuperar la fortaleza del Estado del Bienestar y la solidez de la educación, la sanidad y la atención a personas desfavorecidas".