Seguramente Vox no habría utilizado un vocabulario más duro: de “infamia” ha calificado el consejero de Presidencia de Andalucía, Elías Bendodo, la reunión que “tristemente” ha matenido hoy en Barcelona el presidente del Gobierno con el de la Generalitat.

Para el portavoz del Ejecutivo autonómico, Pedro Sánchez está “blanqueando al independentismo” y al propio Quim Torra por estar el mandatario catalán “inhabilitado” por la Junta Electoral Central.

Como se sabe, Torra está en realidad inhabilitado como diputado del Parlament, no como presidente de la Generalitat. De hecho, esta semana el Parlament ha recurrido ante la Sala de lo Contencioso del Tribunal Supremo la efectividad de la inhabilitación al entender que se basa en una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña que no es firme puesto que está recurrida ante el Supremo.

En declaraciones a los periodistas en el Parlamento, Bendodo ha afeado al presidente español que no tenga tiempo para reunirse con el presidente de Andalucía, la comunidad más poblada de España, para hablar de asuntos como la educación, la educación y la dependencia.

Amarrado al mástil del agravio territorial, Bendodo se ha preguntado si, para Sánchez, Cataluña y Valencia valen más que Andalucía, puesto que van a recibir más fondos en el reparto de las entregas a cuenta correspondientes a 2019 y 2020.

En términos similares se ha pronunciado el presidente de la Junta, Juanma Moreno, para quien “la bilateralidad que hemos visto hoy significa que se quiere quebrar el principio de igualdad en derechos y obligaciones para todos los españoles".

Para Moreno, que considera la reunión de Barcelona “un esperpento”, Sánchez es un “irresponsable que está dando oxígeno al independentismo, regalándole unos gestos y unas fotos que el independentismo no se merece". El Gobierno andaluz, ha advertido el presidente, no va a permitir que "las facturas de las negociaciones con Cataluña las paguemos los andaluces".