Intentó ocultar su crimen denunciado la desaparición de la víctima, pero cayó en su propia trampa cuando empezó a incurrir en contradicciones durante el interrogatorio de la Guardia Civil de Guadix. En realidad, el hombre, de 74 años, había matado él mismo a su mujer, de 57, a martillazos y había enterrado el cuerpo lejos de la vivienda de ambos.
Ya está detenido. El Ayuntamiento de la ciudad granadina ha decretado tres días de luto. Aunque se trata de una caso de violencia de género, no había denuncias previas por malos tratos.
Las incoherencia de algunas respuestas hizo sospechar a los agentes del acuartelamiento de Guadix, que acompañaron al hombre a su casa, donde finalmente admitió haberla matado. Después los condujo al lugar donde había enterrado a la mujer. Se llamaba Pilar.
El Ayuntamiento de Guadix ha expresado su "condena y profundo rechazo” al crimen y trasladado su pésame y todo su apoyo a los familiares de la mujer asesinada. A las 18.00 horas se celebrará una concentración en la Plaza de las Palomas de Guadix "para manifestar públicamente el rechazo de la ciudad ante este asesinato machista”.