La Costa Tropical, situada entre la Costa del Sol y la Costa de Almería, ocupa una privilegiada franja que cuenta con las mejores condiciones y atractivos para disfrutar de unas excelentes vacaciones. Su situación mediterránea, la cercanía con el norte de Africa y Sierra Nevada, con las mayores alturas de la Península, protegen este litoral de los fríos vientos del norte. Un microclima subtropical, con 320 días de sol al año y una temperatura media en torno a los 20 °C, hacen posible el cultivo de frutos tropicales en sus exuberantes vegas.
Temperatura media en invierno ronda los 18ºC
Acantilados, calas y extensas playas configuran el paisaje de esta costa codiciada y conquistada por numerosos pobladores, entre otros fenicios, romanos y árabes, que se la disputaron y dejaron huella de sus culturas. La costa de Granada recibe el nombre de Costa Tropical por sus excepcionales condiciones climáticas. La temperatura media en invierno ronda los 18ºC, mientras que en verano no supera los 25ºC. En esta maravillosa tierra brilla el sol todo el año, calentándola con generosidad en invierno, mientras que la fresca brisa del mar suaviza las altas temperaturas del verano.
Mar y clima
Goza de unas estupendas playas donde el sol y el mar se alían con el clima para intentar regalar al visitante días cálidos y templados durante todo el año. Son playas de contraste donde elegir entre la paz de recónditas calas o el bullicio de las playas más turísticas; disfrutar de largos paseos junto al mar y de jornadas de descanso deleitándose de la tranquilidad del sol y el rumor de las olas; o practicar alguno de los innumerables deportes acuáticos o aéreos como el surf, el windsurf, la vela, el buceo, el parapente, etc.
Grandes núcleos turísticos y tranquilidad
Almuñécar y Motril ofrecen esas playas llenas de las comodidades de los grandes núcleos turísticos: La Herradura, San Cristóbal, el Tesorillo o Velilla (Almuñécar) Calahonda, Poniente, Granada, Torrenueva y Carchuna (Motril). Todas ellas son playas de aguas idóneas para la práctica del submarinismo o la pesca. Si lo que se busca es la tranquilidad, existen numerosas calas solitarias: en Albuñol está la playa de La Guardia y las calas naturales del El Caletón o El Pargo. Los amantes del naturismo encontraran auténticos paraísos en las playas de Cantarriján y del Muerto en Almuñécar, la Joya en Motril y la playa de El Ruso en Albuñol.
Pueblos de la costa
Diecinueve municipios componen el ‘trópico de Europa’. Fundado por los fenicios unos mil años antes de Cristo con el nombre de Sexi, Almuñécar es un lugar cargado de historia que conserva restos de una fábrica romana de salazones, cinco tramos de acueducto y un castillo árabe. Este centro turístico acoge en verano un magnífico festival de jazz.
Motril la gran población
Motril es la mayor población de la provincia tras Granada. Entre sus monumentos destacan la Iglesia Mayor de la Encarnación y el Santuario de Nuestra Señora de la Cabeza, construido sobre el antiguo palacio de recreo de la reina Aixa, madre de Boabdil, el último monarca de la dinastía Nazarí.
Salobreña: Gran montaña de terrones de azúcar
Salobreña se convierte en la imaginación del visitante en una gran montaña de terrones de azúcar. Sus pequeñas casas blancas y cúbicas se arremolinan frente al mar alrededor de una colina coronada por un monumental castillo árabe. Desde la cima se pueden contemplar, en un solo golpe de vista, deliciosas panorámicas sobre Sierra Nevada, el Mediterráneo y una fértil vega.
Pequeñas y tranquilas calas
Junto a las playas de estas localidades existen infinidad de pequeñas y tranquilas calas situadas en Albuñol, Castell de Ferro-Gualchos y La Mamola-Polopos. Cerca se encuentran los municipios de Albondón, Ítrabo, Jete, Lentejí, Los Guájares, Lújar, Molvízar, Murtas, Otívar, Rubite, Sorvilán, Turón y Vélez de Benaudalla, rodeados de una exuberante naturaleza.
Golf, parepente, senderismo...
Además de mar y cultura, la Costa Tropical ofrece infinidad de posibilidades, como la práctica del golf, el parapente, el senderismo en los pueblos situados tierra adentro, el submarinismo en los ricos fondos de Cerro Gordo y los deportes náuticos, que tienen su centro en el puerto deportivo de Marina del Este (Almuñécar) y en el Club Náutico de Motril.
Los frutos tropicales pueden degustarse en ensalada o de postre, en una comida en la que no pueden faltar los pescados de roca como el pargo y el sargo y mariscos como la quisquilla. Y con el café, el ron de caña que también se elabora en la zona.
Fiestas y Cultura
Las fiestas que se celebran en la comarca granadina de la Costa Tropical se encuentran muy enraizadas con las tradiciones y costumbres de la zona, así como con la personalidad de sus habitantes. Los pueblos de la costa celebran cada año las Hogueras de San Juan, las Cruces de Mayo y la pintoresca procesión de la Virgen del Carmen, en julio, patrona de los marineros.
La música popular juega un papel también fundamental. Muestra de ello es el Trovo, cante popular de origen arábigo andaluz, propio de localidades de esta zona como Albuñol. Con él el pueblo expresa sentimientos, quejas, denuncias e historias cantando de forma improvisada estrofas de cinco versos.
De gran renombre es el Certamen Internacional de Guitarra Clásica y Concurso de Composición 'Andrés Segovia', que lleva el nombre del ilustre hijo adoptivo de Almuñécar y La Herradura. Un deleite para los amantes de la música que se celebra en la localidad de Almuñécar durante la primera semana del año. También en la que fuese Sexi romana tienen lugar el Festival Jazz en la Costa, que en sus quince años de andadura ha conseguido reunir a las mejores estrellas del blues, jazz y bossa, o el Certamen de Teatro José Martín Recuerda, en homenaje al dramaturgo granadino.
Gastronomía
El litoral de la actual Costa Tropical granadina, comarca con una milenaria historia, ha contemplado desde la Antigüedad el desembarco en sus idílicas playas, convertidas hoy en uno de sus principales reclamos turísticos, de numerosas civilizaciones que han dejado su impronta. De ella dan fe los restos arqueológicos hallados, necrópolis fenicias, numerosas torres vigía o los castillos desde los que se contemplan las huertas y los cultivos en bancales.
Pescados y mariscos
La cocina de esta comarca debe mucho a la nutrida gama de pescados y mariscos frescos con los que, siglo tras siglo, ha provisto el Mediterráneo a sus diferentes localidades. En sus populosos mercados se pueden encontrar las quisquillas, gambas y cigalas tan típicas de la zona, así como todo tipo de pescados. Desde los más habituales -pescadillas, pargos, sargos, doradas y lubinas- a otros más inusuales como congrios, meros o rayas que se preparan en los restaurantes de variadas y exquisitas formas.
Fenicios, romanos, griegos y musulmanes han dejado su impronta en la costa granadina. Desde las técnicas de las salazones, introducidas por los fenicios y mejoradas por los romanos, hasta el amor por la huerta y los vegetales que los musulmanes heredaron de los griegos, el mestizaje cultural ha configurado la gastronomía de estas costas. La popular sopa zalamandroña es una buena muestra de ello.
Frutos tropicales
Desde América, junto a alimentos como la patata, el pimiento o el tomate llegaron también, de la mano de los primeros exploradores españoles, especies de frutos tropicales. El similar clima de la costa granadina ha permitido que las plantaciones de productos tropicales fructifiquen en esta zona, abundando las plantaciones de mango, níspero, guayaba, aguacate y chirimoya, y las recetas que mezclan estos sabores con los productos más tradicionales.
Vino "Costa"
En Albuñol se produce también el vino “Costa”, mientras que la pequeña Bodega Horacio Calvente, situada en Jete aunque con sus viñedos en la Sierra de Cázulas, está elaborando tintos y blancos de gran calidad. El ron de caña que se elabora en Motril es un magnífico digestivo para finalizar la sobremesa.
Turismo activo
Si el visitante busca diversión y acción, la Costa Tropical le ofrece todas las posibilidades que el mar Mediterráneo permite. Todo un abanico de deportes náuticos para practicar: windsurf, esquí acuático, vela, moto acuática, submarinismo, buceo, etc.
Las playas de Carchuna o La Herradura son los lugares idóneos para surcar las olas con una tabla de windsurf, realizar esquí acuático, vela, navegar velozmente a bordo de una moto acuática o simplemente disfrutar de un buen baño en sus cálidas y cristalinas aguas. Unas aguas que invitan al buceo, ya que en sus ricos fondos marinos hay valiosas praderas de posidonia y especies marinas como meros, pargos y congrios.
Acantilados de Maro-Cerro Gordo
Hay lugares de gran belleza que el visitante debe conocer, localizados en los Acantilados de Maro-Cerro Gordo. En este lugar la Sierra se abre al mar Mediterráneo. Existen dos puertos deportivos para el amarre de embarcaciones localizados en el Club Náutico Deportivo de Motril, con 168 amarres, y el Club Náutico Marina del Este de Almuñécar, situado en la Punta de la Mona (La Herradura), con 227 amarres.
Además, en Motril se ubica uno de los dos campos de golf de la provincia, el Club de Golf los Moriscos, para quienes quieran combinar las jornadas marítimas con otras más tranquilas, practicando su ’swing’.
El interior
El visitante no debe olvidar las poblaciones del interior de esta comarca, donde los parajes y espacios naturales son también escenarios idóneos para las actividades de turismo activo. Pasear por los senderos y caminos forestales de la Sierra de Almijara o del Parque Ecológico de Peña Escrita, en Almuñécar, y realizar rutas a caballo o en todoterreno está al alcance de la mano de los visitantes.
Turismo Activo
Pero si lo que quiere el turista es descargar la adrenalina sobrante, nada más fácil que surcar los cielos con un parapente o ala delta, realizando vuelo libre, contemplando las bellas calas de la costa y los escarpados acantilados y barrancos. La amplia oferta de la comarca de la Costa Tropical se completa con excursiones en trike, descenso de cañones, escalada o trekking.
Río Verde, es quizá el mejor lugar de la provincia para practicar el descenso de barrancos. Las aguas templadas y color esmeralda de este curso constituyen una espectacular ruta acuática, excavada de forma sorprendente en el corazón de la Sierra de la Almijara desembocando en el término municipal de Almuñécar.
Temperatura media en invierno ronda los 18ºC
Acantilados, calas y extensas playas configuran el paisaje de esta costa codiciada y conquistada por numerosos pobladores, entre otros fenicios, romanos y árabes, que se la disputaron y dejaron huella de sus culturas. La costa de Granada recibe el nombre de Costa Tropical por sus excepcionales condiciones climáticas. La temperatura media en invierno ronda los 18ºC, mientras que en verano no supera los 25ºC. En esta maravillosa tierra brilla el sol todo el año, calentándola con generosidad en invierno, mientras que la fresca brisa del mar suaviza las altas temperaturas del verano.
Mar y clima
Goza de unas estupendas playas donde el sol y el mar se alían con el clima para intentar regalar al visitante días cálidos y templados durante todo el año. Son playas de contraste donde elegir entre la paz de recónditas calas o el bullicio de las playas más turísticas; disfrutar de largos paseos junto al mar y de jornadas de descanso deleitándose de la tranquilidad del sol y el rumor de las olas; o practicar alguno de los innumerables deportes acuáticos o aéreos como el surf, el windsurf, la vela, el buceo, el parapente, etc.
Grandes núcleos turísticos y tranquilidad
Almuñécar y Motril ofrecen esas playas llenas de las comodidades de los grandes núcleos turísticos: La Herradura, San Cristóbal, el Tesorillo o Velilla (Almuñécar) Calahonda, Poniente, Granada, Torrenueva y Carchuna (Motril). Todas ellas son playas de aguas idóneas para la práctica del submarinismo o la pesca. Si lo que se busca es la tranquilidad, existen numerosas calas solitarias: en Albuñol está la playa de La Guardia y las calas naturales del El Caletón o El Pargo. Los amantes del naturismo encontraran auténticos paraísos en las playas de Cantarriján y del Muerto en Almuñécar, la Joya en Motril y la playa de El Ruso en Albuñol.
Pueblos de la costa
Diecinueve municipios componen el ‘trópico de Europa’. Fundado por los fenicios unos mil años antes de Cristo con el nombre de Sexi, Almuñécar es un lugar cargado de historia que conserva restos de una fábrica romana de salazones, cinco tramos de acueducto y un castillo árabe. Este centro turístico acoge en verano un magnífico festival de jazz.
Motril la gran población
Motril es la mayor población de la provincia tras Granada. Entre sus monumentos destacan la Iglesia Mayor de la Encarnación y el Santuario de Nuestra Señora de la Cabeza, construido sobre el antiguo palacio de recreo de la reina Aixa, madre de Boabdil, el último monarca de la dinastía Nazarí.
Salobreña: Gran montaña de terrones de azúcar
Salobreña se convierte en la imaginación del visitante en una gran montaña de terrones de azúcar. Sus pequeñas casas blancas y cúbicas se arremolinan frente al mar alrededor de una colina coronada por un monumental castillo árabe. Desde la cima se pueden contemplar, en un solo golpe de vista, deliciosas panorámicas sobre Sierra Nevada, el Mediterráneo y una fértil vega.
Pequeñas y tranquilas calas
Junto a las playas de estas localidades existen infinidad de pequeñas y tranquilas calas situadas en Albuñol, Castell de Ferro-Gualchos y La Mamola-Polopos. Cerca se encuentran los municipios de Albondón, Ítrabo, Jete, Lentejí, Los Guájares, Lújar, Molvízar, Murtas, Otívar, Rubite, Sorvilán, Turón y Vélez de Benaudalla, rodeados de una exuberante naturaleza.
Golf, parepente, senderismo...
Además de mar y cultura, la Costa Tropical ofrece infinidad de posibilidades, como la práctica del golf, el parapente, el senderismo en los pueblos situados tierra adentro, el submarinismo en los ricos fondos de Cerro Gordo y los deportes náuticos, que tienen su centro en el puerto deportivo de Marina del Este (Almuñécar) y en el Club Náutico de Motril.
Los frutos tropicales pueden degustarse en ensalada o de postre, en una comida en la que no pueden faltar los pescados de roca como el pargo y el sargo y mariscos como la quisquilla. Y con el café, el ron de caña que también se elabora en la zona.
Fiestas y Cultura
Las fiestas que se celebran en la comarca granadina de la Costa Tropical se encuentran muy enraizadas con las tradiciones y costumbres de la zona, así como con la personalidad de sus habitantes. Los pueblos de la costa celebran cada año las Hogueras de San Juan, las Cruces de Mayo y la pintoresca procesión de la Virgen del Carmen, en julio, patrona de los marineros.
La música popular juega un papel también fundamental. Muestra de ello es el Trovo, cante popular de origen arábigo andaluz, propio de localidades de esta zona como Albuñol. Con él el pueblo expresa sentimientos, quejas, denuncias e historias cantando de forma improvisada estrofas de cinco versos.
De gran renombre es el Certamen Internacional de Guitarra Clásica y Concurso de Composición 'Andrés Segovia', que lleva el nombre del ilustre hijo adoptivo de Almuñécar y La Herradura. Un deleite para los amantes de la música que se celebra en la localidad de Almuñécar durante la primera semana del año. También en la que fuese Sexi romana tienen lugar el Festival Jazz en la Costa, que en sus quince años de andadura ha conseguido reunir a las mejores estrellas del blues, jazz y bossa, o el Certamen de Teatro José Martín Recuerda, en homenaje al dramaturgo granadino.
Gastronomía
El litoral de la actual Costa Tropical granadina, comarca con una milenaria historia, ha contemplado desde la Antigüedad el desembarco en sus idílicas playas, convertidas hoy en uno de sus principales reclamos turísticos, de numerosas civilizaciones que han dejado su impronta. De ella dan fe los restos arqueológicos hallados, necrópolis fenicias, numerosas torres vigía o los castillos desde los que se contemplan las huertas y los cultivos en bancales.
Pescados y mariscos
La cocina de esta comarca debe mucho a la nutrida gama de pescados y mariscos frescos con los que, siglo tras siglo, ha provisto el Mediterráneo a sus diferentes localidades. En sus populosos mercados se pueden encontrar las quisquillas, gambas y cigalas tan típicas de la zona, así como todo tipo de pescados. Desde los más habituales -pescadillas, pargos, sargos, doradas y lubinas- a otros más inusuales como congrios, meros o rayas que se preparan en los restaurantes de variadas y exquisitas formas.
Fenicios, romanos, griegos y musulmanes han dejado su impronta en la costa granadina. Desde las técnicas de las salazones, introducidas por los fenicios y mejoradas por los romanos, hasta el amor por la huerta y los vegetales que los musulmanes heredaron de los griegos, el mestizaje cultural ha configurado la gastronomía de estas costas. La popular sopa zalamandroña es una buena muestra de ello.
Frutos tropicales
Desde América, junto a alimentos como la patata, el pimiento o el tomate llegaron también, de la mano de los primeros exploradores españoles, especies de frutos tropicales. El similar clima de la costa granadina ha permitido que las plantaciones de productos tropicales fructifiquen en esta zona, abundando las plantaciones de mango, níspero, guayaba, aguacate y chirimoya, y las recetas que mezclan estos sabores con los productos más tradicionales.
Vino "Costa"
En Albuñol se produce también el vino “Costa”, mientras que la pequeña Bodega Horacio Calvente, situada en Jete aunque con sus viñedos en la Sierra de Cázulas, está elaborando tintos y blancos de gran calidad. El ron de caña que se elabora en Motril es un magnífico digestivo para finalizar la sobremesa.
Turismo activo
Si el visitante busca diversión y acción, la Costa Tropical le ofrece todas las posibilidades que el mar Mediterráneo permite. Todo un abanico de deportes náuticos para practicar: windsurf, esquí acuático, vela, moto acuática, submarinismo, buceo, etc.
Las playas de Carchuna o La Herradura son los lugares idóneos para surcar las olas con una tabla de windsurf, realizar esquí acuático, vela, navegar velozmente a bordo de una moto acuática o simplemente disfrutar de un buen baño en sus cálidas y cristalinas aguas. Unas aguas que invitan al buceo, ya que en sus ricos fondos marinos hay valiosas praderas de posidonia y especies marinas como meros, pargos y congrios.
Acantilados de Maro-Cerro Gordo
Hay lugares de gran belleza que el visitante debe conocer, localizados en los Acantilados de Maro-Cerro Gordo. En este lugar la Sierra se abre al mar Mediterráneo. Existen dos puertos deportivos para el amarre de embarcaciones localizados en el Club Náutico Deportivo de Motril, con 168 amarres, y el Club Náutico Marina del Este de Almuñécar, situado en la Punta de la Mona (La Herradura), con 227 amarres.
Además, en Motril se ubica uno de los dos campos de golf de la provincia, el Club de Golf los Moriscos, para quienes quieran combinar las jornadas marítimas con otras más tranquilas, practicando su ’swing’.
El interior
El visitante no debe olvidar las poblaciones del interior de esta comarca, donde los parajes y espacios naturales son también escenarios idóneos para las actividades de turismo activo. Pasear por los senderos y caminos forestales de la Sierra de Almijara o del Parque Ecológico de Peña Escrita, en Almuñécar, y realizar rutas a caballo o en todoterreno está al alcance de la mano de los visitantes.
Turismo Activo
Pero si lo que quiere el turista es descargar la adrenalina sobrante, nada más fácil que surcar los cielos con un parapente o ala delta, realizando vuelo libre, contemplando las bellas calas de la costa y los escarpados acantilados y barrancos. La amplia oferta de la comarca de la Costa Tropical se completa con excursiones en trike, descenso de cañones, escalada o trekking.
Río Verde, es quizá el mejor lugar de la provincia para practicar el descenso de barrancos. Las aguas templadas y color esmeralda de este curso constituyen una espectacular ruta acuática, excavada de forma sorprendente en el corazón de la Sierra de la Almijara desembocando en el término municipal de Almuñécar.