Desde 1975 se celebra cada 26 de enero el Día Internacional de la Educación Ambiental. En Andalucía se cumple este año el 40 aniversario de la creación de la primera granja escuela de nuestra comunidad, la granadina "Huerto Alegre" a la que seguiría poco después "El Molino de Lecrín" en el valle del mismo nombre.

El Colegio Oficial de Biólogos de Andalucía (COBA)  ha hecho un balance de la  educación medioambiental con motivo de su celebración anual porque los profesionales de la Biología están detrás de muchas de las iniciativas en este ámbito. 

En Andalucía, los programas de Educación Ambiental se desarrollan en dos modalidades: la Red de Ecoescuelas y la Educación Ambiental para la Sostenibilidad y llegan a 1068 centros, con 29.111 profesores implicados y una cobertura de 339.217 alumnos, según los datos correspondientes al curso 2020-2021 publicados por la Consejería de Educación de la Junta.

Aunque los programas de Educación Ambiental son los más implantados después de los de Promoción de Hábitos de Vida Saludable, tienen un notable potencial de crecimiento porque Andalucía cuenta con 4.560 centros de enseñanza de titularidad pública, a los que hay que sumar otros 2.004 concertados y sólo una cuarta parte de los públicos están involucrados en programas de Educación Ambiental.

En el ámbito de la Educación no formal hay que destacar la existencia de la Red Andaluza de Centros de Educación Ambiental ONDAS que agrupa a 24 establecimientos entre granjas escuela y aulas de la Naturaleza, presidida por María Luz Díaz Guerrero de la granja escuela Huerto Alegre de Granada, 

Si se cuentan todas las entidades que desarrollan programas de educación ambiental en Andalucía en diversos formatos, el censo es de 91. En buena parte de ellas trabajan biólogas y biólogos en tareas de dinamización ambiental, divulgación y fomento del turismo sostenible en la naturaleza.

La Educación Ambiental es una herramienta fundamental para lograr los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y las metas de la Agenda 2030 en el proceso de transición ecológica en el que está embarcado todo el planeta. En España y en Europa, los fondos de recuperación para la salida de la pandemia contemplan la pedagogía y la concienciación en todas las líneas de ayuda porque sin el compromiso individual y colectivo no es posible una lucha eficaz contra el cambio climático.