El portavoz del Grupo Socialista en el Parlamento gallego, Xoaquín Fernández Leicega, tomó la iniciativa de la “España vaciada” que se manifestó en Madrid, con un clamor que resonó con fuerza para exigir a los partidos políticos un pacto de Estado contra la despoblación. En la sesión de control al gobierno en el Parlamento gallego, el socialista propuso un acuerdo al presidente Alberto Núñez Feijóo para impulsar las Iniciativas Territoriales integradas siguiendo el modelo escocés.

El portavoz advirtió al presidente de la Xunta que el balance de su gestión, después de 10 años de gobierno, es un “fracaso sin paliativos del que Feijóo quiere huir”. De modo irónico, Leiceaga, comparó la diligencia del líder de los populares gallegos con el antiguo líder del Partido Comunista chino, Deng Xiaoping, cuando dijo que “después de dos siglos, aún era pronto para hacer una evaluación de la Revolución Francesa”.

Asimismo, urgió a Feijóo a afrontar al menos un “pequeño balance” y asumir que existe “una Galicia que da marcha atrás”, con 28 comarcas en las que la población disminuyó en un 15 por ciento, con situaciones críticas como en las de dos comarcas de Ourense y Pontevedra, que perdieron un 30 por ciento. Mientras que para los que nacen, esgrimió Fernández Leiceaga, “se cierran escuelas, se reducen rutas de transporte y tienen dificultades para encontrar empleo”.

En la misma línea, el socialista, acusó a la Xunta de tomar decisiones contra el reequilibrio territorial como la supresión de varias áreas sanitarias y el desastre de sus políticas de empleo, como se puede comprobar en las comarcas del interior. Fue entonces cuando Feijóo, para sorpresa de muchos de los presentes, señaló a Madrid, y concretamente al gobierno de Pedro Sánchez, al que acusó de jugar a la contra del equilibrio territorial en Galicia, al no destinar un presupuesto suficiente.

En la réplica el responsable socialista le afeó a Feijóo que dejase sin responder la gestión del gobierno gallego, para centrar sus ataques en el Gobierno de España, lo que evidencia, aseveró, que “quiere jugar en la política estatal y así poder confrontar”.

Por este motivo le sugirió que si quiere ser líder de la oposición a Sánchez “tendrá que irse al Senado”, como senador por designación autonómica, para participar en las sesiones de control al presidente del Gobierno. Entretanto, insistió el portavoz, es el gobierno gallego quien tiene la competencia para emprender políticas que reviertan el declive demográfico, al que aluden el informe del Instituto de Estudios del Territorio del propio gobierno autonómico, además del Instituto Gallego de Estadística (IGE), que apuntan a un fututo complicado con una mayoría de comarcas del interior que perderán un 20 por ciento de la población en 15 años. Son zonas, explicó el portavoz, que están “situadas a 20 puntos de distancia de la renta media por habitante de Galicia, con mayoría de pensionistas, donde apenas nacen niños”.

Mientras, las acusaciones del socialista no fueron negadas por Feijóo, pero reivindicó su derecho a declararse indignado con las políticas del Gobierno de Pedro Sánchez. Su línea discursiva se desvió a la subida del diésel o a los conflictos de Alcoa y Ence. Por lo que Fernández Leiceaga, echó en cara al presidente gallego que no tenga ninguna política eficaz que ofrecerles a estas localidades, después de que los planes “Impulsa Lugo e Impulsa Ourense” demostrasen su fracaso; de la misma manera que los préstamos del Instituto Gallego de Promoción Económica (IGAPE) no llegasen a estas comarcas, ni las inversiones de la Xunta estén dirigidas mínimamente a corregir estos desequilibrios.

Para terminar el socialista le propuso a Feijóo recuperar la figura aprobada en el Parlamento de Galicia hace un año, pero que fue olvidada por Feijóo. Se trata del acuerdo para recurrir a las Iniciativas Territoriales Integradas (ITI), un instrumento dispuesto por la Unión Europea que integra la colaboración institucional para recuperar los territorios. Fernández Leiceaga apostó por utilizar este instrumento para seguir el modelo escocés de la Agencia Especializada que gestiona fondos comunitarios y propios y que fue experimentada con éxito. La ITI que propuso el responsable socialista incorpora en la misma dirección a las universidades y a las instituciones para conformar una “apuesta especializada y competente a medio y largo plazo”.