Nuestro país es uno de los estados más aficionados al cine pornográfico del mundo. Según el departamento de datos de la web ‘PornHub’, solo 12 países consumen más porno a través de internet que España. Una afición que viene de lejos. Hace ya más de 100 años que los españoles empezaron a consumir películas eróticas. Todo ello gracias a Alfonso XIII, el abuelo del rey Juan Carlos I.

 

Se trata de una curiosa historia que incomoda a la monarquía y de la que los medios de comunicación apenas han difundido detalles. Sin embargo, gracias a los estudios realizados por el escritor e historiador Roman Gubern, sabemos que la afición del monarca a las películas con escenas subidas de tono era tan grande que el monarca no sólo se conformó con ser un mero espectador, sino que optó por convertirse en productor pornográfico.

En concreto, el rey Alfonso XIII pagó el rodaje de tres películas ‘X’: 'El confesor', 'El consultorio de señoras' y 'El ministro'. Cintas que pueden verse en algunas de las principales páginas pornográficas de internet y que el monarca rodó a través de la productora ubicada en Barcelona ‘Royal Film’.

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Fotograma de 'El Ministro', una de las películas porno que produjo el Rey Alfonso XIII. 

Con una duración de cuarenta minutos, 'El confesor' cuenta la historia de un sacerdote que se ‘beneficia’ de su poder sobre las feligresas. 'El consultorio de señoras', con una mayor duración y realizada técnicamente mejor que ‘El Confesor’, aborda la historia de un doctor que se excede con sus pacientes. Su tercera obra, 'El ministro', está protagonizada por una mujer que propone a un ministro recibir un trato de favor a cambio de recibir favores sexuales.

Historias que el monarca hizo rodar en la década de 1915-1925 a los hermanos Baños, considerados por el propio Roman Gubern como "los hermanos Almodóvar de esa época". Para ver sus trabajos, Alfonso XIII llegó a habilitar una sala de proyecciones en el Palacio Real, a la que invitaba a amigos y nobles. Por tanto, sus películas solo se movían en círculos muy pequeños de coleccionistas.