La entrevista de Antonio García Ferreras a Pablo Iglesias en Al Rojo Vivo de laSexta ha tenido algunos momentos de tensión. Sobre todo cuando el periodista le ha preguntado por Monedero y sus amenazas al diputado Yllanes. El secretario general de Podemos intentó evitar el asunto diciendo que los dos habían "zanjado" el asunto y no quería hacer "ningún comentario" sobre ello. "Mi gente entiende que determinados enfangamientos son una falta de respeto a la militancia y yo soy su secretario general y los tengo que cuidar".

Ferreras insistió en que le interesa mucho "cuando alguien amenaza a un diputado" e Iglesias le lanzó un dardo: "Te gusta más la información original que la reconciliación (...). Yo respeto que tú no quieras hablar de Inda en tu programa, pero podemos pensar diferente. Y el Parlamento dice que no pagar la pensión alimenticia es violencia machista".

Ferreras zanjó ese frente advirtiendo a Iglesias de que "no nos levantamos por la mañana para hacer amigos".

Durante la entrevista, Iglesias insistió en que "estoy muy a gusto trabajando con Íñigo y le quiero a mi lado" y negó que hubiera purga de 'errejonistas'. "No, eso no lo hay. Puede haber cambios de equipo de trabajo. Hay muchas cosas que pueden cambiar, pero esa palabra no tiene cabida en nuestra formación", aseguró. Sobre si hay demasiado poder concentrado en su figura de secretario general apuntó que "tenemos que ir a una estructura mucho más coral" y que en su momento eligieron una estructura "presidencialista" para "un momento en el que teníamos que ser máquina electoral". "Esa estrategia fue correcta durante algún tiempo, pero es hora de cambiar", aseguró. 

Al final Iglesias volvió sobre sobre su buena relación "personal" con Errejón al hablar sobre su famoso beso para El Intermedio: "
Nos queremos mucho (...) se nos nota hasta en la manera en la que nos tocamos". "Soy como Cristiano con los penaltis, si me dicen que lo tire, lo tiro", bromeó sobre la petición del programa de que se besaran.