Seis ayuntamientos con nombres franquistas se enfrentan ahora a la posibilidad de tener que responder ante la Justicia. La rama Contencioso-Administrativa ha admitido a trámite varias demandas presentadas contra seis consistorios que se han negado a responder a las peticiones para que se retirasen las reminiscencias de la dictadura de sus nombres oficiales.
Esta admisión llega después de que se hayan superado los 45 días que les otorga la normativa para responder y ahora su silencio llega a los tribunales.
Los ayuntamientos son Alberche del Caudillo (Toledo), Villafranco del Guadiana (Badajoz), Quintanilla de Onésimo (Valladolid) San Leonardo de Yagüe (Soria), Villafranco del Guadalhorce (Málaga) y Guadiana del Caudillo (Badajoz). Este último caso es el más paradigmático, según descubrió ELPLURAL.COM, porque el Ayuntamiento no sólo se niega a retirar el nombre, sino que se gasta dinero público en instalar cámaras de seguridad para proteger placas y señales que hacen apología de la dictadura.
Las demandas contra los municipios parten del abogado madrileño Eduardo Ranz, quien señala que se está incumpliendo la Ley de Memoria Histórica casi 10 años después de su entrada en vigor. La norma señala que los gobiernos locales están obligados a retirar todos los símbolos que se refieran a la dictadura, como es el caso, pues hacen referencia no sólo al dictador, sino al fundador de las JONS, Onésimo Redondo, y al general Juan Yagüe, conocido como el carnicero de Badajoz.
Por el contrario, tres municipios españoles han cambiado su nombre y han eliminado estas referencias, según informa la Cadena SER. Es el caso del sevillano Queipo de Llano, que ahora se llama Cinco de la Riuela; Bembézar, en Córdoba, que antes se llamaba Bembézar del Caudillo, y Águeda, en Salamanca, donde también se ha borrado el añadido de “del Caudillo”.
