De José Bono conocemos la marca del pan tostado que consume, su camisero habitual y hasta el número de zapato que gasta. Su patrimonio y el de su familia, ingresos, cuentas corrientes y propiedades fueron entregadas por él personalmente a la Mesa del Congreso que presidió durante tres años, además de estar publicadas de la “A” a la “Z” en su declaración de bienes y rentas en la página web de la Cámara Baja, medida de transparencia, por cierto, propuesta por el propio Bono (un calco de la ley vigente en Castilla-La Mancha), que fue aprobada por PSOE y la izquierda en 2009. No solo eso, el Tribunal Supremo y la Fiscalía General del Estado archivaron las denuncias de María Dolores Cospedal y del PP, instigadas por La Gaceta y por ciertos abogados de tendencias ultras al igual que el rotativo de Intereconomía. Jueces y fiscales dijeron que no había nada que investigar y que las cuentas de Bono eran lícitas y transparentes.

“Cortina de humo para despistar”…
Pero que el Alto Tribunal, la Fiscalía, los jueces y la práctica totalidad de los partidos políticos (a pesar de Cospedal, el PP se abstuvo) cerraran filas en torno a José Bono y avalaran la procedencia lícita de su patrimonio, no ha bastado para que María Dolores Cospedal se olvide de una “batalla perdida en los tribunales y en la opinión pública”, reconocen a ELPLURA.COM fuentes socialistas, y vuelva a la carga con la cansina teoría del enriquecimiento del expresidente del Congreso de los Diputados. “Hay personas que fueron dignatarios y dirigentes de Castilla-La Mancha que ahora tienen patrimonios inmensos y nadie ha dado nunca ninguna explicación”, declaró el domingo la secretaria general del PP en Toledo, en un acto donde intentó justificar lo injustificable sobre el cierre de las urgencias de 21 pueblos. “Una cortina de humo en un intento de despistar al ciudadano”, dicen las mismas fuentes. Ciudadanía que este fin de semana ha vuelto a echarse a la calle para protestar por la política sanitaria de Cospedal, siendo Guadalajara, la provincia que precisamente le dio la victoria en las elecciones de 2011, donde mayor calado ha tenido las protestas.

…Y patrimonio de Cospedal sin declarar
Y es que Cospedal no es, precisamente, el ejemplo a seguir a la hora de transmitir a la ciudadanía confianza y transparencia. La prueba está en que cada vez que la ahora presidenta de Castilla-La Mancha tiene que presentar su obligada declaración de patrimonio y renta, siempre, absolutamente siempre, hay polémica. En este sentido, ELPLURAL.COM, que en su día publicó las posibles anomalías en la declaración de bienes de la también secretaria general del PP, demuestra que, efectivamente, la política mejor pagada de España reconoce a medias su patrimonio, como lo prueba la casa que le ha regalado la empresa de su marido, Ignacio López del Hierro, y que ella reconoce ser propietaria del 50% de 280 m2, cuando en realidad la mansión ocupa una superficie construida de 584 metros cuadrados, como este periódico adelantó en su día ()

Fachada del cigarral de María Dolores de Cospedal en Toledo



Nota simple, porque el algodón no engaña…
Mientras que el patrimonio de José Bono es transparente, a pesar de las dudas lanzadas durante la pasada semana por las huestes de Cospedal, encabezadas por su mano derecha y presidente del Parlamento castellano-manchego, Vicente Tirado, el de la presidenta tiene ciertas y preocupantes lagunas, como por ejemplo, el “olvido” (no siempre recuerda sus posesiones) de declarar la mitad de 12.100 metros cuadrados de parcela en la elitista zona de Los Cigarrales toledanos, valorada en 2,5 millones de euros, que como la nota simple del Registro de la Propiedad reconoce es “titular en cuanto a una mitad indivisa del pleno dominio de esta finca con carácter privativo”. O lo que es lo mismo, es dueña y señora del 50% de una casa de 584 metros y de una finca donde se asienta la vivienda de 12.100 metros cuadrados. ().

…Ni las declaraciones de bienes tampoco
A pesar de que todo esto al PSOE manchego no parece preocuparle, el caso es que las declaraciones de bienes de María Dolores Cospedal se convierten cada año en su auténtico sudoku. Y como muestra un simple botón: En su declaración de 2009 ) declara poseer una cuenta corriente de 508.822 euros, achacando este descomunal ingreso a la venta de un piso en Madrid. Bien, puede ser, pero dónde fue a parar el medio millón un año después, ya que en su declaración de 2010 recoge un saldo medio en sus cuentas bancarias de 70.100 euros (), sin que por ahora sepamos qué pasó con esos 438.722. Al menos en sus obligadas declaraciones de bienes no está justificado. Por eso, Cospedal lleva toda la razón cuando dice que “cada cual aguante su palo”.