Ser rey y tener amigos de verdad debe ser algo difícil de compatibilizar. Sin embargo, como nos ocurre a todos en los malos momentos, su progresiva retirada de la vida pública ha servido a Juan Carlos I para descubrir a sus compañeros fieles. Y no ha debido ser una tarea sencilla, a juzgar por lo que el general Sabino Fernández Campos definía como las "amistades peligrosas" del Rey, según publica Vanitatis.
Bajo esa denominación estaba la llamada 'corte de Mallorca', de la cual, prácticamente todos, están, hoy en día, en la cárcel, condenados o imputados en el marco de distintos casos. Idéntica situación a la de otros grandes empresarios "amigos" del emérito, entre los que también encontramos al polémico comisario Villarejo.
Necesariamente, don Juan Carlos ha tenido que apartarse de muchos de ellos. Con otros, su relación comenzó a deteriorarse tras su abdicación. Pero con unos pocos, ese momento supuso un reforzamiento de su amistad. Destaca el citado medio que Miguel Arias, Josep Cusí, Pedro Campos y José Fanjul han sabido mantener intacta su lealtad con el paso del tiempo sin necesidad de publicitar su amistad. Son ellos, los cuatro amigos fieles, con los que el monarca podrá pasar más tiempo a partir de ahora.
Miguel Arias
Este empresario madrileño conoció a Juan Carlos I en la venta Arias que su familia regentaba en Navacerrada, lugar en el que ambos pudieron compartir su pasión por el esquí.
Entre los distintos restaurante de los que es propietario actualmente destaca Flanigan, establecimiento de cabecera para la Familia Real durante sus veraneos mallorquines en el palacio de Marivent y donde se dejaban fotografiar amablemente intentando aparentar cierta cordialidad familiar.
Josep Cusí
Armador e ingeniero de telecomunicaciones perteneciente a la burguesía catalana, también podemos considerarle como el mayor confidente del rey. Se conocieron en una regata en 1972 y terminaron formando parte del mismo equipo. Actualmente, el emérito es padrino de una de sus hijas.
Era a Cusí a quien don Juan Carlos confesaba su felicidad junto a Marta Gayá, a pesar del riesgo a que ese romance se hiciese público, en las conversaciones grabadas por el CESID.
Pedro Campos
El empresario y presidente del Club Náutico de Sanxenxo es, además, patrón del Bribón y uno de los claros ejemplos de amistad reforzada tras la abdicación. Campos es sobrino del expresidente Leopoldo Calvo Sotelo, y es uno de los que conforma la 'pandilla gallega' de de Juan Carlos. Gracias a él, el Borbón volvió a navegar después del rosario de operaciones y achaques de los últimos años. Su casa ha servido de alojamiento en numerosas ocasiones en las que el rey estaba por la zona.
José (Pepe) Fanjul
El llamado 'rey del azúcar' es uno de los más importantes magnates de toda Latinoamérica. Don Juan Carlos suele hospedarse en sus hoteles de República Dominicana o Palm Beach cuando quiere huir de la frialdad de Zarzuela, tal y como sucedió las pasadas navidades.