Hace relativamente poco escribía un análisis sobre la Junta de fiscales de Sala que debía decidir sobre si apoyar o no la amnistía. En aquellas líneas hacía una comparativa con la mítica serie Juego de tronos. Así, el fiscal general del Estado se convertía en una especie de Jon Nieve de los Stark, mientras que los cuatro fiscales del procés pertenecían a la familia de los Lannister. Entonces les decía que en la Fiscalía General del Estado se iba a vivir ‘la boda roja’, y se vivió, solo que con un final completamente diferente al de la serie, pero es que la realidad siempre supera la ficción. Pues bien, esta mañana podremos ver al fiscal general del Estado como vimos a Jon Nieve en 'La Noche más larga' sacando la espada contra todo un ejército y contra un dragón que le encaraba directamente para asesinarle.
García Ortiz, como el protagonista de la mítica serie, saldrá al campo de batalla a sabiendas del coste personal y profesional que le va a suponer, pues los cuervos de los Lannister volarán con noticias frescas para los medios de derechas, que no dudarán en narrar cada una de las dulces palabras que reciban (ironía modo on), pues ha convocado a todos los enemigos para escuchar lo que tienen que decir. Y les digo ya que no se van a callar, que la petición de dimisión será lo más flojo que escuchemos.
El fiscal general cuenta con las tropas del Norte y las de más allá del muro, que hasta ahora han rendido como lo hicieron en la mítica serie…pero la pregunta es si conseguirá otros apoyos, otras tropas, una Arya Stark, que daga de acero valirio en mano, tenga la capacidad de acabar con el rey de la noche. Un rey de la noche que si tuviera nombre español igual se llamaba Miguel Ángel y se apellidaba Rodríguez, con un ejército de los muertos conformado por políticos del PP, señorías del Supremo, miembros de la Junta de fiscales de Sala y, como no, medios de comunicación afines que no dudarán en seguir la estela señalada por el líder.
El Jon Nieve de esta historia sabe perfectamente lo que este jueves va a suceder y, pese a todo, no ha dudado en salir al campo de batalla. Me los imagino a todos como en el final de 'El caballero de los Siete reinos' sentados alrededor del fuego, siendo plenamente conscientes de la batalla que está por venir, con una copa de vino en la mano mientras alguien canta Jenny of Olstones.
Porque si algo está claro es que Álvaro García Ortiz, como Jon Nieve, no tiene miedo de enfrentarse a cualquier enemigo, aunque eso suponga no solo ataques directos de sus compañeros sino, y como va a suceder, que en lugar de sangre aquí corran ríos y ríos de tinta para conseguir que como mínimo, presente su dimisión. El final de esta historia está aun por escribirse, pero este jueves en Invernalia, digo en la calle Fortuny, 4, se va a vivir uno de los capítulos más importantes que pueden suponer un antes y un después en este, nuestro particular Juego de tronos togado.