La reforma de la Puerta del Sol que inicia el Ayuntamiento de Madrid la próxima semana no incluirá zonas verdes en el centro de la plaza, según adelantó la delegada de Obras y Equipamientos, Paloma García Romero, cuando los periodistas les preguntaron por la ausencia de plantas en el proyecto. "Les garantizo que hemos intentado incorporar un mayor número de árboles, pero no nos han dejado", ha asegurado.

La responsable de Obras del Ayuntamiento explicó que "la Puerta de Sol es un Bien de Interés Cultural (BIC), así que cualquier actuación necesita los permisos correspondientes de la comisión local de Patrimonio", que ha rechazado cualquier propuesta municipal de plantar árboles en el interior de la plaza. El motivo es que en un 90% de la plaza hay una losa muy superficial que impide a los árboles echar raíces, según ha explicado el director general de Espacio Público, Obras e Infraestructuras del Ayuntamiento de Madrid, José Luis Infanzón.

Para la comisión de Patrimonio no tiene sentido plantar árboles en el 10% restante porque aunque es posible desde el punto de vista técnico, no lo es desde el punto de vista estético. Una de las soluciones que barajó el área de Obras fue incorporar maceteros, pero esto también será imposible porque podrían constituir un problema para la policía del distrito Centro que patrulla la zona. Los agentes han solicitado que la plaza sea lo más diáfana posible para evitar que puedan ocultarse o entorpecer el paso. Además, los maceteros podrían ser utilizados como cobijo de la droga.

Los representantes del Ayuntamiento intervinieron en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal con el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, para dar los detalles de la reestructuración de la emblemática plaza, que supondrá una inversión municipal de 10,7 millones de euros. Las obras durarán, previsiblemente, hasta la primavera de 2023, justo a tiempo para la campaña electoral para las elecciones autonómicas y municipales de 2023.

Otro de los aspectos de la remodelación que ha generado cierta polémica es la elección del vidrio para varios elementos de la plaza. La clásica ballena de Cercanías se sustituirá por una estructura de cristal para permitir una visión total del espacio. Y también se usará la misma materia para los quioscos y los ascensores de la plaza. "El vidrio se ha elegido porque muy ágil, transparente, para dar la sensación de una plaza abierta", ha justificado la delegada.

Sobre el hecho de que el vidrio es un material que se calienta al sol, delegada tranquilizó explicando que "ese vidrio va a tener un tratamiento para mitigar las radiaciones solares", y recordó que el cristal es "lo más utilizado en la arquitectura del siglo XXI".