El pasado 9 de abril se celebró el enlace entre Belén Barnechea y Martín Cabello de los Cobos en Perú. La boda fue una de las más comentadas y despertó fuertes críticas en redes sociales por la contratación para la misma de un grupo de personas para que actuaran como esclavos indígenas.
Belén Barnechea es la única hija de Claudia Ganoza y el intelectural y político peruano Alfredo Barnechea, excandidato presidencial. Forma parte del grupo de peruanas emprendedoras que se ha instalado en Madrid. Ha trabajado en comunicación y como agente mobiliaria tras su formación en el Emerson College de Boston.
Reside en la capital desde el 2017 y tiene su propia marca, Casa Manjar, un negocio enfocado en la venta de pasteles y tartas, así como de otros dulces peruanos, lo que le ha valido que sea conocida en nuestro país como la 'repostera de la jet'. Este apodo obedece al hecho de que los clientes que consiguió cuando comenzó el negocio pertenecen a las más altas esferas.
Por otro lado, Martín Cabello de los Cobos es nieto de los condes de Fuenteblanca de España. Su abuelo, quien falleció en 2021, fue el octavo conde de Fuenteblanca y contaba con el título de caballero del Cuerpo de la Nobleza de Madrid.
Forma parte de una numerosa familia de once miembros, propietaria de una casa palacio en La Rambla, que está considerada una de las más prestigiosas de la campiña cordobesa y un claro ejemplo de arquitectura nobiliaria.
La polémica boda
La pareja se dio el 'sí, quiero' en Trujillo (Perú) y mientras celebraban la boda y andaban por las calles de la ciudad, surgió la polémica que tanto ha dado que hablar por redes sociales. Hicieron una escenificación de las nupcias en el virreinato, es decir, había mujeres indígenas en el suelo mientras caminaba con su esposo.
Ante la ola de críticas por el uso de las representaciones indígenas para festejar el matrimonio, la protagonista ha defendido que sus intenciones se malinterpretaron y ha insistido en que su boda ha sido una muestra de “diversidad cultural”.
