Cada día 2 de octubre se celebra el Día Internacional de la No Violencia por decreto de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Se celebra precisamente porque se conmemora el nacimiento de Mahatma Gandhi, el líder del movimiento para la independencia de la India de los británicos con la no violencia.
Un mundo sin violencia es una utopía, por eso, para recordar la importancia de la paz se ha establecido este día. Según demuestran datos de la OMS, cada año 1,6 millones de personas pierden la vida debido a la violencia. El problema no radica únicamente en el número de personas que mueren, sino también en aquellas que sobreviven a esta violencia y sufren problemas de salud física y mental por ello.
A grosso modo, el 56% de las personas que mueren por violencia lo hacen por suicidio, el 33% por lesiones ocasionadas por las personas y el 11% debido a las guerras y otros modos de violencia colectiva. Los tipos de violencia más comunes y conocidos son la violencia de género, la violencia racial, violencia religiosa, violencia homofóbica y la violencia criminal.
Las estadísticas de la ONU estimaron que el 50% de las mujeres que murieron en todo el mundo en 2017 lo hicieron por un acto violento propinado por su pareja o algún miembro de su familia. Pero no toda violencia termina en muerte, ya que actos violentos también son insultos, acosos, vejaciones…
La lucha por la no violencia de Gandhi
Mahatma Gandhi hizo historia con su lucha por los derechos y su nombre traspasa las fronteras de la raza, la religión y las naciones. Sin duda, fue una de las grandes personalidades del mundo en el siglo XX. “Existen muchas causas por las cuales estoy dispuesto a morir, pero ninguna por la cual esté dispuesto a matar”, escribió en 1927.
Después de vivir en Sudáfrica un tiempo, regresó a la India, donde extendió sus discursos en los que combinaba la política y los pasajes de los libros sagrados de distintas religiones. Posteriormente, se convirtió en el líder del movimiento independentista de la India frente al poder británico. Lejos de animar a las masas a la lucha armada, la no violencia que promovía Gandhi establecía la resistencia pacífica y nuevos modos de oposición.
Decenas de discípulos, periodistas y el propio Gandhi recorrieron más de 300 kilómetros hasta el océano Índico reclamando su derecho a producir sal, un producto de vital importancia en el país para la conservación de los alimentos.
La marcha se convirtió en una inspiración para los movimientos de no violencia de Martin Luther King y en 1930, la revista Time, llegó a compararla con el episodio del motín del té de Boston, que desembocó en la independencia de Estados Unidos. Aunque la marcha del sal no tuvo el mismo resultado, sí dejó claro a los británicos el poder de la no violencia de Gandhi para unir al pueblo en su contra.
Cómo celebrar el Día Internacional de la No Violencia
El propósito de este día es educar y concienciar a las personas de que existen otros caminos distintos a la violencia para lograr los objetivos. Sin duda, una de las grandes enseñanzas de Gandhi a lo largo de su vida.
Hay que explicar la importancia de la no violencia y su poder para conseguir un mundo más pacífico, tolerante y comprensivo. Debido a que es difícil de conseguir en una sociedad como en la que vivimos, la ONU pide que, por lo menos, durante el 2 de octubre se difunda el mensaje de cambio.