Cieza es uno de los más de 300 municipios en España que cuenta con el reconocimiento de Ciudad Amiga de la Infancia. Sin embargo, a juicio del Partido Animalista PACMA, ha dejado de ser merecedora de esta distinción, por lo que la formación ha presentado una solicitud formal a la Secretaría de la CAI de UNICEF España para que se le retire.
La razón que esgrime la formación para adoptar esta medida es que este sello, que distingue a las localidades comprometidas con la protección y promoción de los derechos de la infancia, "resulta incompatible con la organización de actividades taurinas y cinegéticas dirigidas a menores", como las que se han programado en Cieza en el marco de las fiestas patronales, tanto en 202, como en 2025. Estas iniciativas incluyen encierros con menores, clases de toreo de salón dirigidas a niños y simulación de tiro en el marco de una convivencia por la caza.
Para PACMA "la infancia necesita espacios de educación en valores, empatía y respeto hacia los animales, no de exposición a espectáculos que normalizan la violencia contra ellos". Por ello, subrayan, "no se puede considerar Ciudad Amiga de la Infancia a un municipio que destina recursos públicos y respaldo institucional a actividades crueles que ponen en riesgo la sensibilización de los más pequeños".
No solo Cieza, más de un centenar de municipios
El pasado mes de febrero, el partido ya mantuvo en Madrid una reunión con responsables del citado programa de UNICEF en la que presentó un informe detallado sobre, al menos, 108 municipios españoles en los que ocurre lo mismo: gozan de este reconocimiento al tiempo que permiten y promueven actividades taurinas en las que participan menores de edad. PACMA considera fundamental que UNICEF revise las concesiones a estas localidades a estas y cualquier otra que mantenga prácticas similares, "contrarias a los principios de una sociedad avanzada".
Por otro lado, la formación pide a la sociedad que de "un paso adelante" y deje de "acudir o apoyar este tipo de espectáculos".
Un reconocimiento al compromiso real con los derechos de la infancia
El título de Ciudad Amiga de la Infancia no es simbólico. Lo reciben los municipios que demuestran un compromiso estructurado y verificable con los derechos de la infancia, recogidos en la Convención sobre los Derechos del Niño de Naciones Unidas.
La distinción la concede UNICEF tras una evaluación rigurosa basada en tres grandes pilares: la participación infantil y adolescente en las políticas locales, el desarrollo de planes locales de infancia y adolescencia (PLIA) y las acciones que promueven la equidad y la no discriminación.
El objetivo es garantizar que las decisiones de los gobiernos locales no solo se elaboren “para” la infancia, sino “con” la infancia.
En su última convocatoria, a finales de 2024, UNICEF reconoció con este sello a 20 municipios más, entre ellos Zarautz (País Vasco), Calvià (Baleares), Benalmádena (Andalucía) y Alzira (Comunidad Valenciana), ampliando así la red nacional a 321 ciudades.
Aunque las iniciativas que se llevan a cabo en las ciudades con esta distinción varían en función del tamaño, el contexto socioeconómico y la región, es frecuente que incluyan la creación de Consejos Municipales de Infancia y Adolescencia donde los jóvenes participan activamente en la toma de decisiones; la implementación de planes locales de infancia con presupuestos propios; el desarrollo de programas contra el acoso escolar y la pobreza infantil, así como de políticas activas para la inclusión de niños migrantes, con discapacidad o en riesgo de exclusión; y la mejora del acceso a espacios públicos seguros y de calidad.
Andalucía, Castilla-La Mancha y Cataluña son las comunidades autónomas que cuentan con más Ciudades Amigas de la Infancia. Por el contrario, Ceuta y Melilla aún no tienen representación formal en la red.
El sellot, no obstante, no es permanente y tiene una vigencia de cuatro años, tras los cuales la localidad debe renovarlo mediante un proceso de evaluación y rendición de cuentas.
“Este reconocimiento exige acción continua, no es una medalla para colgar en la pared del Ayuntamiento”, enfatiza Lucía Losoviz, directora de Políticas de Infancia de UNICEF España.