'Médicos por la verdad' en España es una asociación que dice investigar y denunciar la “verdad” que no quieren decir los gobiernos, y con el coronavirus activo se han puesto las pilas para destapar toda clase de “falacias”. Ese es el mensaje que venden frente al "oscurantismo de la realidad gubernamental" y está repleto de conspiraciones y bulos.

‘Maldito Bulo’ y ‘Newtral’ son los medios de comunicación digitales por excelencia en detectar difamaciones y, a raíz de todos los disparates que han surgido durante la pandemia, se han encargado de desmentir toda noticia falsa, poniendo especial atención en esta asociación de médicos.

Uno puede perder la cuenta de las afirmaciones que han hecho acerca del virus, que contradicen toda medida y declaración del Gobierno de España, e incluso de otros países, apoyándose en supuestas citas de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Pero no actúan únicamente en nuestro país. Su epicentro reside en Alemania, desde donde su discurso se ha ido extendiendo hacia otros territorios. 

El pasado 25 de julio dieron una rueda de prensa en el Palacio de la Prensa de Madrid, acogiendo a un público que también desconfía de la credibilidad de la pandemia del siglo XXI. No obstante, sus múltiples declaraciones han sido puestas sobre la mesa y se ha comprobado su falta de veracidad. .

Negacionismo en toda regla

El uso de la mascarilla es uno de sus caballos de batalla. Aunque al principio de la pandemia el debate sobre quién debía portar las mascarillas fue algo confuso, se dictaminó cuando fue posible que se extendiese a toda la población. No obstante, la doctora Natalia Prego defiende que su uso no es necesario en personas sanas, sino que debería afectar solo a “médicos, cuidadores, sanitarios y enfermos”, que únicamente deberían llevarlas en zonas de alto riesgo, como hospitales o residencias de mayores.

‘Maldito Bulo’ ha alzado la voz de alarma en este sentido, dado que su uso sí protege y previene los contagios porque actúa como barrera para evitar la dispersión de las gotas que expulsamos al hablar, estornudar o toser, que pueden llevar consigo el virus.

Respecto al confinamiento, el de España, considerado como uno de los más estrictos de Europa, también tienen quejas. Separando los efectos económicos que tiene sobre nuestro país, denuncian que es una medida “excesiva” para la población sana. 

Apuntalan su teoría en que la OMS se opuso a los confinamientos, lo cual es falso: esta organización no se posicionó en contra, sino que estimó oportuno que los estados recurriesen a esta medida dado que no tenían a su alcance métodos de rastreo.

Ahora, con la 'nueva normalidad' vigente, recalcan que los efectos de la cuarentena han hecho mella en la población: “El miedo es el verdadero virus ahora que no hay pandemia”, afirma el doctor Rafael Gazo. Curiosamente, es un hecho que existe el miedo al virus por la gran cantidad de rebrotes que están surgiendo y la alta cifra de fallecimientos, pero recalcar con seguridad la negación de la pandemia es como ponerse una venda en los ojos.

El “peligro” de los tratamientos anti-covid

Otro punto que tratan reside en las pruebas PCR y los test rápidos que llevan meses en circulación y que ayudan a detectar la enfermedad. A su juicio las PCR no son válidas dado que, según sus ideales, un positivo puede referirse a otro virus de la misma genética o a una bacteria, así que descartan su fiabilidad.

En el lado contrario, y correcto, de estas afirmaciones, el principal problema reside en los “falsos negativos”, dado que los “falsos positivos” no se dan como tales, sino que se trata de discrepancias en el test que llevan a la inmediata repetición de la operación.  

Estas pruebas detectan la presencia de ARN del virus para determinar si el paciente es negativo o positivo, aunque la doctora Albarracín defiende que puede darse el caso de que se trate de otro tipo de coronavirus. “Una prueba de PCR que solo detecta un cachito de ARN no indica que la persona esté enferma, que sea contagiosa, no tienen que confinarse las personas que han obtenido un positivo”, afirma. De nuevo, el argumento se realiza reinterpretando de forma interesada declaraciones de la OMS. 

Los males de las vacunas

La organización también a demostrado estar preocupada por los efectos secundarios de las vacunas. Según sus 'estudios' se están realizando pruebas con la vacuna contra la gripe para paliar los efectos de la Covid-19, lo cual también es falso. 

Afirman que muchas personas que han fallecido por el virus se debe a que, de por medio, ha habido alguna “intervención de vacunas”. Es por ello que insisten en su discurso antivacunas, exigiendo al Gobierno que frene sus recomendaciones de vacunación, especialmente en personas mayores.

“Terror informativo” y mentiras con las patas cortas

Otro de sus 'enemigos' es la prensa nacional, a la que acusan de sembrar el miedo entre la población y tergiversar las noticias a favor del Gobierno.

Acusan a los medios de actualizar los datos diarios de los nuevos brotes del virus sin resaltar los casos asintomáticos, e insistiendo en que estos “supuestos contagios” no son del todo reales: “Lo demás es terrorismo informativo, y desde aqui lo denuncio”, subrayaron en la citada rueda de prensa. 

En lo referente a los puntos más importantes que defiende la organización, destaca la “inexistencia” de la pandemia. El médico Ángel Ruiz-Valdepeñas ha sido recientemente expedientado por difundir estas declaraciones y, posteriormente, pedir donaciones para la causa.

En un vídeo, en el que aparece junto a la doctora Natalia Prego, reclaman a la ciudadanía respaldo económico “para tantos proyectos de investigación, de gestión y de denuncia” y así “sostener a esta asociación de médicos”.  

No es un camino solitario

Lamentablemente, la asociación no está sola en la “lucha contra las mentiras del Gobierno". Existen otros grupos que siembran dudas y bulos. 

Este es el caso de la Revista Discovery DSalud, suplemento 'científico' que recoge, tanto en su web como en formato papel, el discurso de la “falsa pandemia”, apoyado por supuestos científicos y periodistas independientes. 

Difunde titulares de calibre sensacionalista del tipo: “Las cifras de muertos no demuestran que haya habido una pandemia”, muy similar al discurso de la organización de médicos. Su director José Antonio Campoy ha realizado declaraciones del mismo tipo, asegurando haberse puesto en contacto con los científicos de Wuhan e incidiendo en las mentiras y encubrimientos pagados de otros virólogos y científicos.