En la sala de asilo del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas se concentran en estos momentos cerca de 60 ciudadanos marroquíes pendientes de la decisión del Ministerio del Interior sobre si se les concede o no el asilo en España. Del total de estos 57, diez de ellos iniciaron el domingo una huelga de hambre después de que el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska denegara sus respectivas solicitudes. Cinco de estos diez, según informan desde Moncloa, han desayunado este mismo lunes. Entre tanto, Podemos arremete contra el Gobierno al acusarles de no aceptar sus condiciones para “no molestar a Marruecos”.

En Interior tienen constancia de las acciones iniciadas por este grupo de diez ciudadanos procedentes de Marruecos en las últimas horas, aunque informan que cinco de ellos han aceptado este lunes el desayuno. Según exponen desde la cartera del ramo, en la sala de asilo de la infraestructura madrileña hay en la actualidad un total de 57 ciudadanos marroquíes pendientes de la decisión del ministerio que capitanea Grande-Marlaska, aunque este corpúsculo de diez personas ya se le ha comunicado que la solicitud ha sido denegada.

Estas personas solicitaron el asilo hace unos días, pero España ha decidido negárselo sin explicar los detalles. Según El Mundo y Europa Press, el Ministerio del Interior se escuda tras Ley de Protección de Datos para no aportar más explicaciones sobre su decisión, aunque sí aseguran que estos diez ciudadanos serán devueltos a Marruecos. En este sentido, precisan que el personal sanitario sigue “permanentemente su situación, por si fuera necesaria asistencia específica”, especialmente a quienes se han acogido a la huelga de hambre. No obstante, apuntan que “no ha sido requerida” ayuda por el momento.

Quejas de Podemos

En paralelo, una delegación de Podemos ha visitado el aeropuerto donde permanecen los “saharauis retenidos”, aunque sin capacidad para acceder a la sala de asilo. La secretaria general de la formación morada, Ione Belarra, ha aprovechado para cargar las tintas contra el Gobierno de coalición, especialmente hacia el Ministerio del Interior. La exministra de Asuntos Sociales y Agenda 2030 ha asegurado que tiene la sospecha de que Moncloa no acepte las peticiones de acogida para “no molestar a Marruecos”, país al que ha identificado con una dictadura.

Podemos quiere centrar el foco en la situación “inhumana” que viven estas casi 60 personas, por lo que se prevé que otros miembros de la cúpula morada se desplacen hasta la infraestructura madrileña a lo largo de esta jornada. Entre los rostros de esa delegación estarán los del secretario de Organización y portavoz orgánico de la formación, Pablo Fernández, y el de la secretaria de Discurso, Acción Institucional y portavoz adjunta, María Teresa Pérez.

Por su parte, en una entrevista concedida a Radio Nacional de España (RNE), la abogada del grupo en huelga, Fatma El Galia, denunció anoche que hay una treintena de saharauis que han pasado su primera noche en huelga de hambre en el aeropuerto Adolfo Suárez. La letrada destacó en la radio pública que sus defendidos “alegan y prueban” que son “activistas saharauis perseguidos” por el régimen marroquí. De hecho, apuntaba que “algunos han estado en prisión” y han sido “torturados”.

Estamos ante hechos probados para solicitar protección internacional, porque corren peligro si vuelven a su país”, aseguraba El Galia, denunciando que varias de las personas retenidas llevan en el aeropuerto desde hace semanas. Una situación que en absoluto es novedosa, pues los problemas derivados de los solicitantes de asilo que piden protección en su escala en Barajas han provocado la intervención del Gobierno para evitar el colapso de las instalaciones ante la llegada de ciudadanos de países africanos como Senegal, Kenia o Mauritania, además de Marruecos. En otros casos, se ha decretado la implantación de visados de tránsito que eviten que se reproduzcan fraudes al hacer la escala en la capital de España.