Marisol trabajaba como subdirectora en una de las oficinas de CaixaBank en Salamanca y su vida cambió el día en que conoció a Chari, que dirige el centro maternoinfantil Ave María de Santa Marta de Tormes, en Salamanca.  Allí acogen a madres solteras con niños de 0 a 4 años y a mujeres gestantes en dificultades. “A mí el voluntariado siempre me había llamado la atención y, al conocer a Chari, empecé a ayudar en algunas cosas. Pero fue cuando me prejubilé que tuve tiempo para venir mucho más a menudo”. Ahora es una de los más de 10.000 voluntarios de "la Caixa" que colaboran en acciones solidarias.

Las historias de las mujeres que viven en el centro, conocido por algunos como 'la casa de la Chari', son duras pero allí reciben, entre otras cosas, cariño y medios para poder salir adelante con sus pequeños. Begoña es un buen ejemplo de ello. “Llegué aquí en la Nochebuena del 2015 y, desde entonces, mi vida ha cambiado completamente”. Cuando entró, llevaba tres días en la calle, embarazada de cinco meses, después de sufrir una situación de maltrato por parte de su pareja. Su hija tiene ahora dos años y cuenta con una gran familia. “La gente de aquí ha reconstruido mi corazón, lo ha pulido y le ha sacado brillo. Me han hecho resurgir de las cenizas”. Begoña ha podido criar a su pequeña, estudiar y conseguir trabajo. Sin la ayuda de personas como Marisol, nunca lo habría logrado.

Si quieres leer el reportaje completo de la "gran familia" de Marisol, puedes hacerlo en Alma, el portal social social de la Fundación "la Caixa".