Los cuerpos de Rubén e Izan, de 3 y 5 años, han sido encontrados sin vida finalmente este miércoles, tras una intensa y angustiosa labor de búsqueda en Torrent (Valencia). Los menores desaparecieron días atrás, arrastrados por la riada provocada por la DANA mientras estaban en compañía de su padre.

La familia quedó atrapada debido al temporal provocado por la DANA el pasado 29 de octubre, y desde entonces no se había sabido nada de los pequeños hasta hoy, 13 de noviembre, cuando han sido hallados sus cuerpos sin vida, según han confirmado varias fuentes municipales. 

Estos niños se encontraban con su padre en su casa de campo cerca del barranco de l'Horteta, en Mas del Jutge, cuando un golpe de agua derrumbó una de las paredes de la casa, provocando que fueran arrastrados por la riada.

Su padre los vio por última vez, quien, en un intento desesperado por salvarlos, logró agarrarse a un árbol y permaneció allí durante cuatro angustiosas horas. Sin embargo, finalmente perdió de vista a sus hijos en medio de la catástrofe provocada por el temporal.

La familia acudirá a los juzgados para realizar el reconocimiento de los cuerpos, que han sido localizados en dos localidades diferentes, a varios kilómetros de Torrent.

"¡Angelitos míos, al fin hemos dado con vosotros! Desgraciadamente con la peor de las noticias para todos. Gracias de corazón a todo el mundo que se ha volcado con ellos. Dos estrellas brillan más en el cielo",  ha expresado un familiar en redes sociales.

15 días de búsqueda intensiva

Durante estos días de búsqueda, la comunidad de Torrent se ha volcado con la familia, unida por el dolor y la esperanza de encontrar a los pequeños.

Unas 150 personas se han sumado a esta gran búsqueda con el objetivo de encontrarlos. Entre ellas se encontraban vecinos, amigos, sanitarios, buzos y equipos de rescate, quienes recorrieron sin descanso los lugares cercanos a la vivienda familiar y otras zonas afectadas, investigando cada detalle que pudiera indicar dónde se hallaban los niños.

Numerosos voluntarios han intentado sin descanso sumarse al operativo, explorando terrenos complicados en vehículos todoterreno, motos e incluso a pie, bajo las condiciones devastadoras que ha dejado como consecuencia la DANA.