El Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia ha dado por estabilizado el incendio forestal, fase intermedia entre el fuego activo y el controlado, que ha arrasado parte de Llutxent, Valencia.
El fuego comenzó en Llutxent a las 15:00 horas del pasado lunes y ha quemado más de 3.000 hectáreas de los términos municipales de Gandía, Llutxent, Pinet, Ador, Barx y Quatretonda, según el último recuento.
Juan Ramón Chismol, alcalde de Pinet, ha asegurado que el incendio ha calcinado el 70% de su término municipal, pero sin haber afectado a las viviendas del municipio, por lo que en las próximas horas los vecinos podrán volver a sus casas.
La prioridad: reubicar a las familias afectadas
Por su parte, el president de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado este jueves que el Consell y los ayuntamientos de la zona buscarán "soluciones habitacionales" para las familias afectadas por el incendio.
El jefe del Consell ha explicado que la prioridad será reubicar a "aquellas familias que tienen su primera residencia afectada" por las llamas y ha informado de que aquellas que fueron desalojadas por prevención pero que finalmente sus viviendas no se han visto afectadas empezarán a regresar a ellas en las próximas horas.
Tras ello, ha manifestado que se empezarán a planificar las actuaciones de carácter medioambiental y de apoyo a las poblaciones afectadas, algo que, según ha señalado, aún "tardará un tiempo", en concreto, hasta que se dé por extinguido el incendio.
"El peor incendio de los últimos cinco años"
En este sentido, el president de la Generalitat ha indicado que aún se está "lejos" de conseguir la extinción, puesto que, aunque el incendio esté "estabilizado dentro del perímetro", sigue "demasiado vivo".
Puig ha aseverado que este incendio es "el peor en los últimos cinco años" en la Comunitat Valenciana y ha destacado "la enorme profesionalidad" de todas las brigadas y efectivos que están luchando contra su propagación y velando por la seguridad de los vecinos de la zona.
"Lo más importante frente a un incendio de estas características es salvar la vida de las personas", ha subrayado Puig, quien ha añadido que los desalojos han sido "decisiones dolorosas" que, sin embargo, han evitado que se hayan producido víctimas mortales y solo haya que lamentar "el destrozo medioambiental".