La Diócesis de Alcalá de Henares promueve desde 2009 la iniciativa “Holywins” y cada año consigue ser más popular e ir ganando adeptos. Holywins es el movimiento que surge en contraposición a Halloween y que viene a significar “la santidad gana”. Tiene como objetivo ayudar a reforzar la fiesta cristiana de Todos los Santos ante la cada vez más popular fiesta “pagana” de Halloween.

Mientras la popular fiesta de Halloween bromea con la vida y la muerte, el bien y el mal, el movimiento cristiano de Holywins busca encajar en el Evangelio de Cristo y la Tradición de su Iglesia. La Iglesia continuamente ha cargado contra Halloween por tildarlo de una mascarada en la que solo hay muertos, “no queremos compartir el culto a la muerte y la exaltación de lo monstruoso o feo que trae consigo, pues lo propio de los cristianos es celebrar el triunfo de la vida y promover la belleza y el bien”, comenta el Obispado de Alcalá de Henares en su página web.

La iniciativa tiene a su máximo promovedor en el Obispo de Alcalá de Henares, Juan Antonio Reig Plà y así lo ha demostrado en las anteriores ediciones de la festividad. Se invitan a niños y adolescentes, así como sus familias y todos los demás que quieran participar. Después de celebrarse una misa, comienza la evangelización por las calles.

Algunas de las propuestas para acudir al evento cristiano y no disgustar al Obispo es conveniente revisar la iconografía clásica de los santos, de tal modo que serán adecuados los disfraces que imiten a santos como: San Atanasio, San Felipe Neri, San Juan Bautista, Santa Teresa de Jesús, Santa Catalina de Siena o Santa Juana de Arco. Se puede hacer juegos disfrazando a varios niños con santos emparentados, tales como: Santo Isidro labrador y María de la Cabeza o Santo Enrique, emperador y Cunegunda, emperatriz.

La festividad cada vez consigue llegar más lejos y aunque tenga su epicentro en Alcalá de Henares, también llega a otras Diócesis. Un año más también se suma a la iniciativa de Holywins Toledo, donde se oficiará una santa misma, un concierto oración y una evangelización por las calles, donde los niños podrán lucir sus mejores disfraces acordes con la religión.