Poco después de las 9:00 horas de la mañana, llegaba la segunda medalla olímpica para los españoles. Álvaro Martín conseguía el bronce en los 20 kilómetros marcha, por detrás del oro del ecuatoriano Brian Daniel Pintado y la plata del brasileño Caio Bonfim. Con este segundo metal, se rompe la racha negativa que la delegación española viene sufriendo en los últimos días, con alguna opción de medalla pero ninguna conseguida finalmente.
Nada más cruzar meta, el atleta extremeño se ha mostrado especialmente emocionado y ha hecho unas declaraciones dirigiéndose a todos aquellos que, como él tuvo en un pasado, tienen el sueño olímpico entre sus objetivos. "Soy un tío muy normal, de pueblo, de un pueblo de 6.000 habitantes del sur de Extremadura, de un club extremeño. Y pensar que puedes ganar una medalla olímpica, es todo un sueño, y también esperanzador para otros que dirán 'Si ese tío es normal, de carne y hueso'. Y luego también orgulloso porque lo he sabido compaginar con mis estudios, dos carreras universitarias y tampoco soy un lumbreras. No me creo un superhéroe ni nada y aún así he conseguido mi medalla olímpica y mi carrera universitaria intentando ser la mejor persona posible".
Otro de los momentos emotivos que ha protagonizado esta mañana Martín ha sido cuando se ha reencontrado con su entrenador, José Antonio Carrillo, tras ganar la medalla, y con su familia.
Doble medalla
Un triunfo que ha venido seguido de la plata de María Pérez, pocos minutos después, también en 20 kilómetros marcha en categoría femenina, por detrás de la china Yang, con una distancia entre ambas de 30 segundos.
Con estas dos últimas medallas en este súper jueves donde se han puesto todas las esperanzas, el Comité Olímpico Español reúne ya tres. La primera de ellas, de bronce, fue para Fran Garrigós en judo tras vencer al georgiano Giorgi Sardalashvili.