Isabel Celaá, ministra de Educación y Formación Profesional, ha anunciado hoy que revertirá el decreto de racionalización del gasto público en educación, que provocó recortes en las aulas, y derogará algunos artículos de la Lomce, como el de trayectorias curriculares y la asignatura de Religión. Esta asignatura dejará de tener efectos académicos y de tener una asignatura alternativa o espejo.

Sin embargo, será obligatoria una asignatura de Valores Cívicos y Éticos, centrada en los derechos humanos y virtudes cívico-democráticos como fija la Declaración de París de 2015. “La educación debe fomentar la libertad, la ciudadanía o la tolerancia”, ha enfatizado. Además, el Gobierno derogará los itinerarios que marcaba la Lomce a partir de los 13 años pues, según Celaá, “condicionan las opciones y el futuro del alumnado según su rendimiento”.

También se suprimirán las reválidas contempladas en la Lomce -el anterior ministro, Íñigo Méndez de Vigo, las paralizó- y se recuperarán Programas de Diversificación Curricular para apoyar al alumnado con más dificultades de rendimiento.

Celaá ha manifestado, no obstante, que se recuperarán las evaluaciones diagnósticas, en concreto, en cuarto de Primaria y segundo de Educación Secundaria Obligatoria (ESO). Se busca analizar planes para la mejora de los centros, en colaboración con las comunidades autónomas y se darán recursos a los barrios más pobres para ayudar a los alumnos a elevar sus resultados académicos.