La Policía Nacional ha arrestado a dos individuos en relación con delitos contra la salud pública y falsedad documental en las localidades de Dos Hermanas y Sevilla. Los sospechosos se dedicaban a la venta de recetas médicas fraudulentas a través de una aplicación de mensajería instantánea. Además, revendían un jarabe por un precio hasta cuatro veces superior al del mercado. Este medicamento era empleado para crear una droga conocida como 'purple drunk', lo que ha generado preocupación entre las autoridades por el potencial riesgo para la salud pública que representa este tipo de actividades ilegales.

La investigación comenzó cuando agentes de la Policía Nacional, durante tareas de prevención en Dos Hermanas, observaron a un individuo realizando maniobras sospechosas con su vehículo. Al detenerlo, descubrieron en su interior varias recetas médicas de un hospital de Murcia y once botes de jarabe para la tos sin abrir. Estos hallazgos fueron determinantes para el desarrollo de la investigación. La Policía, en un comunicado, detalló que las recetas incautadas eran falsas y que los botes de jarabe contenían un compuesto derivado de un opiáceo, utilizado para fabricar la droga 'purple drunk'.

Detenidos en Sevilla y Dos Hermanas por vender falsas recetas médicas

Los botes de jarabe confiscados fueron enviados al laboratorio químico toxicológico de Policía Científica para su análisis. Los resultados confirmaron que el jarabe contenía un compuesto derivado de un opiáceo, lo que reforzó la sospecha de su uso para la fabricación de 'purple drunk'. Esta droga ha generado preocupación entre las autoridades debido a sus peligrosos efectos en la salud de los consumidores.

Las investigaciones también incluyeron la verificación de la autenticidad de las recetas médicas incautadas. Se comprobó que ninguna de ellas había sido emitida por el hospital murciano mencionado en los documentos. Este hallazgo fue clave para identificar a los responsables de la falsificación y distribución de las recetas.

Gracias a las indagaciones realizadas, se logró identificar a otro individuo en Sevilla como vendedor de los jarabes y a un hombre en Dos Hermanas como responsable de proveer las falsas recetas. Las recetas se ofrecían en una aplicación de mensajería instantánea por un precio de entre 15 y 30 euros. Además, el jarabe obtenido de manera fraudulenta se vendía por nueve euros, siendo revendido posteriormente por un valor de entre 30 a 40 euros.