Los aeropuertos en verano no solo son testigo de multitud de viajes que se producen de manera diaria dada la época vacacional que corresponde a estos meses del año, sino también de amplias operaciones y despliegues policiales que trabajan para evitar coductas constitutivas de delitos y tráfico de armas, dinero y otros objetos. 

Lo último sucedió este lunes en el aeropuerto de Adolfo Suárez- Madrid Barajas cuando un equipo de la Policía Nacional consiguió detener a una mujer napolitana de 43 años que llevaba escondidos en su vagina tres relojes Rolex robados en España y que entre los tres reunían un valor de 100.000 euros. La operación se llevó a cabo de manera conjunta entre la Policía Nacional, la Guardia Civil y la policía italiana, concretamente la Squadra Mobile de Nápoles, y según han confirmado fuentes policiales, la mujer detenida actuaba como mula de una banda criminal italiana. Según se ha podido confirmar, los relojes eran un Rolex Dateday de color dorado, un Rolex Sky Dweller-Everose Gold, y un Rolex Daytona

En este sentido, el periodista José Luis Torá ha explicado en el plató de Más Vale Tarde que estas mujeres trabajan para grupos organizados robando aquí artículos de lujo para venderlos posteriormente en el país donde actúa la banda, en este caso Italia. Ha añadido que, aunque "no ocupan lugares importantes dentro de su organigrama", "sí que son fundamentales para dar salida a todo ese material que roban". Sobre la manera de actuar de estos grupos, que en Italia reciben el nombre de paranza, Torá ha señalado que "están muy especializados". "Uno de ellos se encarga de visionar, otro de otear toda la zona que quieren robar. Otro se encarga de visualizar a la víctima -estas conocidas como spinners- y el último es quien lleva a cabo el robo. La cuarta parte serían estas mujeres que se llevarían los relojes en su interior a Italia". 

En este caso, la mujer detenida, además de llevar los tres relojes en el interior de su vagina, llevaba también otro en la muñeca, aunque este era falso y la intención era la de despistar a los agentes. Con esta detención, asciende el número de ellas este verano hasta un total de quince que, gracias a las operaciones policiales, se han conseguido destruir ocho organizaciones criminales centradas en este tipo de robos y con este mismo modus operandi. 

Otras detenciones por estupefacientes

De manera paralela a este caso, y también en el mismo día, se detuvo en el aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas a otra mujer por llevar entre los glúteos cuatro kilos de cocaína y, por tanto, cometer un delito contra la salud pública. Los agentes detectaron que esta estaba intentando introducir dos envoltorios entre los glúteos en un control de pasajeros de un vuelo procedente del extranjero. Tras detenerla, la mujer pasó a disposición judicial, donde ya se le está tomando toda la documentación e información necesaria. 

Algo similar sucedió hace dos meses, cuando la Guardia Civil consiguió desarticular un grupo criminal procedente de Guayaquil (Ecuador) que introducía grandes cantidades de cocaína en bolsas de ropa sucia. Se incautaron un total de 538 kilos de clorhidrato de cocaína y fueron detenidas cinco personas.