El Ministerio de Defensa ha decidido expulsar del a un subteniente dos años después de que fuese condenado por abuso sexual continuado a su hijastra de 13 años. El militar argumentó en su defensa que la expulsión era desproporcionada dado su buen comportamiento en el Ejército.

La sentencia de la Audiencia de Sevilla del 2 de marzo de 2015 que lo condenaba a ocho años y seis meses de prisión y a indemnizar a la menor con 60.000 euros por haberle provocado “trastorno de estrés postraumático, depresión mayor y alteraciones en las áreas social, sexual y afectiva”, patologías agravadas con motivo del juicio, según ha publicado El País.

El militar del Ejercito de Tierra decidió recurrir el expediente disciplinario que se abrió tras conocerse la sentencia y que lo expulsó ante la Sala de lo Militar del Tribunal Supremo. Ahora, el Supremo ha estimado que, pese al “buen comportamiento” como militar, esto “no compensa ni atempera la gravedad de su conducta” ni “sirve para aminorar la indignidad y descrédito que los hechos comportan”.