Alzaron la voz nada más conocer lo sucedido en Linares, y este domingo han emitido un comunicado pidiendo acciones inmediatas.

La Agrupación Reformista de Policías tacha de "comprensible" la  "indignación de la población andaluza y del resto de España" y exige que el Director Adjunto Operativo y el Director General de la Policía realicen en la localidad en la que se produjo la agresión una comparecencia pública que sirva para "apaciguar ánimos, condenar los hechos y reestablecer la normalidad y orden público".

"Aunque acertadamente desde la DGP se ha condenado el hecho y la actitud de los agentes implicados, creemos que la gravedad de lo ocurrido requiere que desde las más altas instancias policiales se dé la cara, y en nombre de la comisaría local de Linares y de la mayoría de los miembros de su plantilla, y del resto de España, se repare la mala imagen creada condenando profesional y socialmente el comportamiento de estos dos funcionarios que consideramos y exigimos deben ser inmediatamente propuestos para su expulsión de la Policía Nacional", reza el texto emitido por ARP. 

Del mismo modo, el sindicato pide a la ciudadanía de Linares que siga "como hasta ahora" confiando en el resto de agentes de la comisaría de su localidad. 

ARP avanza también que "sí fuera necesario no tendríamos impedimento en presentarnos como acusación popular para restablecer el daño causado a la familia agredida", a la que han trasladado sus mejores deseos de recuperación. 

"Desde ARP, por conciencia democrática y ánimo progresista y reformista, no vamos a permitir tibieza contra estos comportamientos", advierten, recordando que "según consta en el código ético de la Policía, los agentes deben en todo momento ajustar su comportamiento a los principios de este código".

Y para concluir subrayan: "La efectividad y eficiencia de la Policía depende del apoyo y de la voluntad de cooperación de los ciudadanos·".