Durante los primeros nueve días de marzo, España ha experimentado precipitaciones que ya han alcanzado los niveles esperados para todo el mes, y en algunas zonas se han batido récords históricos de lluvia. Un claro ejemplo de ello es Alcantarilla, en Murcia, donde se ha registrado "casi el doble de lo que llueve en toda la primavera", según precisó este martes Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), en una rueda de prensa. Este inicio de marzo, marcado por la intensidad de las lluvias, ha sido especialmente destacable, ya que la borrasca Jana, que atraviesa la Península, ha activado alertas en hasta 12 comunidades autónomas por lluvias intensas, nevadas en zonas montañosas y fuertes vientos. El paso de esta borrasca ha dado paso a Konrad, una nueva borrasca que también traerá lluvias en el país durante el miércoles y jueves, y el jueves se formará una nueva borrasca "hija" de Konrad, prolongando así el periodo de precipitaciones.
"Marzo ha arrancado con mucha fuerza", señaló Del Campo, y destacó que el propio paso de las borrascas está provocando un periodo prolongado de lluvias en toda la Península. El meteorólogo indicó que, según las previsiones, se espera que las precipitaciones continúen a lo largo de la semana. En particular, las zonas donde se espera que más llueva serán el extremo norte del país y el sur de Andalucía, y el viernes y sábado se producirá un descenso en la cota de nieve, lo que podría ocasionar nevadas a partir de los 800 y 1.000 metros de altitud en el norte. La presencia del anticiclón de bloqueo en el norte de Europa ha sido una de las principales causas de las intensas lluvias. Este fenómeno, en el que un anticiclón se mantiene en una zona durante varias semanas, desvió las borrascas hacia la Península, creando lo que el portavoz de la Aemet calificó como un "pasillo" meteorológico que favorece las precipitaciones.
Mes pasado por agua
Sobre el futuro inmediato, la Aemet ha señalado que, aunque marzo se ha iniciado de manera muy lluviosa, no se puede prever con certeza cómo será la primavera. Del Campo explicó que las discrepancias entre los modelos meteorológicos hacen que no se pueda determinar si el trimestre comprendido entre abril y junio será más seco o más húmedo de lo habitual. Sin embargo, lo que sí se puede asegurar es que, según la predicción estacional para esos meses, hay una alta probabilidad (70%) de que las temperaturas estén por encima de lo normal, especialmente en las zonas costeras del Cantábrico y el Mediterráneo, y en los archipiélagos. Esto sugiere que, aunque no se sabe si lloverá más o menos, las temperaturas durante la primavera podrían ser más cálidas de lo habitual.
En cuanto al balance del invierno, la Aemet ha señalado que el de este año ha sido el quinto más cálido del siglo XXI. Además, fue el segundo invierno consecutivo sin olas de frío, ya que no se registró ningún episodio lo suficientemente severo o duradero como para considerarlo una ola de frío. La temperatura media durante el trimestre invernal fue de 7,8 ºC en la Península, lo que supone una anomalía de 1,2 ºC por encima de lo normal. En los archipiélagos, las temperaturas también fueron más altas de lo habitual, con una media de 11,6 ºC en Baleares (1 ºC por encima de lo normal) y 16 ºC en Canarias (0,8 ºC por encima de lo esperado). Lo que más ha destacado la Aemet es la tendencia en los últimos años: de los diez últimos inviernos, solo uno ha sido frío, mientras que los otros tres fueron cálidos y los seis restantes muy cálidos. Esto subraya una tendencia a la estabilización de inviernos más cálidos y menos fríos en el futuro cercano.
Por otro lado, el invierno también ha sido más seco de lo habitual en muchas zonas de España. Según Del Campo, diciembre fue un mes seco, enero fue húmedo y febrero, nuevamente seco. Aunque algunas zonas del oeste peninsular han registrado las precipitaciones habituales, el centro y el este de la Península no han alcanzado las lluvias esperadas para este trimestre. No obstante, si se toma como referencia el año hidrológico, que va desde el 1 de octubre de 2024 al 9 de marzo de 2025, las precipitaciones han sido algo superiores a lo normal, con una media de 360 litros por metro cuadrado, un 8% más de lo habitual. La Región de Murcia ha sido una de las comunidades más afectadas por estas lluvias, destacando con niveles superiores de precipitación.