El portavoz de campaña de Sumar, Ernest Urtasun, ha señalado este jueves que el debate sobre la presencia de Irene Montero de las listas de la coalición es "legítimo", ya que considera normal que haya gente a la que le hubiera gustado ver a la ministra de Igualdad en el proyecto. Aunque ha precisado que para lograr acuerdos tiene que haber "generosidad y renuncias", ha señalado que el pacto está cerrado y la coalición de izquierdas centrada en la campaña electoral y en explicar las medidas que proponen y en las que llevan un año trabajando.

Urtasun ha expresado que entra dentro de la lógica que haya personas partidarias de que la dirigente de Podemos apareciera en las listas, como también puede haber otras deseosas de que estuviera el ministro de Consumo y líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, que ha renunciado a presentarse, o que IU tuviera más candidatos en puestos de salida.

"Todos esos debates son lógicos, pero también hay que entender que para hacer un acuerdo de este tipo tiene que haber generosidad, tiene que haber renuncias", ha asegurado rotundo Urtasun, que ha reivindicado el "acuerdo amplio" alcanzado entre una quincena de formaciones progresistas para acudir a las urnas en torno a Sumar: "Es el que nos permite salir a ganar". Por ello, ha sacado pecho de la coalición y se ha preguntado en este punto en qué condiciones y perspectivas electorales estarían ahora los partidos coaligados a Sumar de no haber firmado un pacto, remarcando que ha sido posible gracias a "la generosidad de todo el mundo".

Dado que no respondía categóricamente sobre si Montero estaría o no en Sumar, Ernest Urtasun ha incidido en que el acuerdo está "cerrado" con los "mejores candidatos" y la "mejor marca". De esta forma, el portavoz de la formación ha cerrado la puerta a que la ministra de Igualdad sea candidata a pesar de que Podemos sigue pidiendo a Yolanda Díaz que reconsidere la decisión. Una posición que Podemos seguirá defendiendo al menos hasta este sábado al convocar al Consejo Ciudadano Estatal, máximo órgano del partido entre congresos, para analizar los resultados del 28M y el acuerdo con Sumar que ha dejado fuera a importantes rostros de la formación morada.

"Ahora ya estamos en otra fase, ahora vamos a salir a hacer campaña y a tratar de convencer a una mayoría de españoles para que nos den confianza para ganar una mayoría progresista para seguir aplicando las mejores políticas de progreso", ha indicado sobre la estrategia del partido.

Preguntado sobre quién será cabeza de lista de Sumar por Barcelona y si será él, Urtasun ha dicho que su papel es ser el portavoz del partido en todo el país, a la par que avanzado que el anuncio sobre el 'número uno' en esa provincia se hará en los próximos días sin confirmar quién será.

Al mismo tiempo, ha señalado que Díaz está dispuesta a debatir en televisión con otros candidatos de cara a las generales y ha dicho que las elecciones no están perdidas para la izquierda, que tiene que salir a ganar para evitar un escenario "dantesco" como el de Valencia, en alusión al pacto de PP y Vox para gobernar juntos la región y que da importantes concesiones a la extrema derecha, que vuelve a tocar poder tras el pacto en Castilla y León hace un año.

Hacer todo lo posible para que Barcelona tenga un alcalde de izquierdas

Urtasun también ha hablado sobre la oferta del PP al PSC para facilitarle la alcaldía de Barcelona si dejan fuera del futuro gobierno a la actual alcaldesa, Ada Colau. Así, ha indicado que en los Comunes -¡espacio al que él mismo pertenece- están "perplejos" con este debate y ante las reticencias de ERC y los socialistas para un pacto a tres.

Para el portavoz, los tres partidos de izquierdas tienen la "obligación" de ponerse de acuerdo y desde los comunes, ha remarcado, no cejarán en su empeño hasta el sábado, fecha de la constitución del ayuntamiento y en la que se eligirá al próximo alcalde de Barcelona. Su intención es que exista una mayoría progresista y que Trías (Junts) no se haga con la alcaldía al no haber acuerdo y ser el más votado.

Por ello, Urtasun ha animado tanto a ERC como al PSC a que reconsideren su posición y que no sea el PP no sea quien marque la agenda ni tenga en sus manos el mando de la ciudad.

"Es insólito que, siendo Barcelona una ciudad que sigue siendo de izquierdas, porque el electorado ha dado una gran mayoría de izquierdas en las últimas elecciones, ni Esquerra Republicana ni el PSC estén dispuestos a sentarse con nosotros para hacer un acuerdo a tres", incidía al respecto el potavoz de Yolanda Díaz.