El secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, habría sufrido un presunto episodio de acoso en su domicilio este viernes, según fuentes del propio Partido Socialista.
Según han apuntado dichas fuentes a este medio, una mujer se habría colado en el edificio en el que reside el socialista haciéndose pasar por una repartidora, subiendo hasta la planta en la que viven Cerdán y su familia. Una vez allí, "ha llamado a la puerta de la casa diciendo que traía un paquete para él", pero Cerdán no se encontraba en casa y estaba solo su mujer.
Ha sido entonces cuando su esposa se ha ofrecido a coger el supuesto paquete para guardárselo, pero la mujer se ha negado. Tras varias preguntas de la mujer del secretario de organización del PSOE, la falsa repartidora ha reconocido ser periodista.
Siempre según las fuentes socialistas, la mujer se negaba a marcharse y se ha avisado a la Policía Nacional del episodio. Ante las autoridades, la mujer se ha identificado como "periodista de OkDiario".
"El acoso al que se está sometiendo a políticos y periodistas progresistas está adquiriendo un tinte peligroso que supera todos las lineas rojas. En estos momentos se está tramitando la correspondiente denuncia, ante otro atropello más de pseudomedios de ultraderecha financiados con dinero público de administraciones del Partido Popular", han denunciado y afeado las citadas fuentes.
Acoso a políticos y periodistas progresistas en el Congreso
En la misma línea de este episodio, el pasado mes de febrero, la Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP) se vio en la obligación de emitir un comunicado denunciando el "señalamiento, los insultos y las amenazas" a periodistas en el Congreso.
El detonante de aquel mensaje fueron las amenazas del agitador ultraderechista Bertrand Ndongo a una periodista. Ante aquel acoso, la APP rogó al Congreso de los Diputados que adoptara "las medidas necesarias" para que hechos como este cesaran.
"La APP lamenta y rechaza rotundamente que varias personas acreditadas para entrar al Congreso de los Diputados como periodistas hayan señalado, una vez más, a una periodista en las redes sociales difundiendo su fotografía con insultos y atribuyéndole un comportamiento que es falso", sostenía el comunicado.
Por su parte, desde el PSOE reivindicaron que "siempre ha defendido y defiende el libre ejercicio del periodismo como un pilar de nuestra democracia, pero este no puede amparar bajo su apariencia conductas que no respetan ni las leyes ni el código deontológico de la profesión". "Los socialistas insistismos, como hemos venido defendiendo hasta la fecha, en que las acreditaciones de carácter oficial para medios siempre deben responder a criterios profesionales y de ética periodística, donde es fundamental la obligación de la difusión de información veraz, verificada y contrastada. No deben ser, pues, para aquellos pseudoperiodistas que no son más que matones de corrientes ultras y que solo están en las instituciones para derribarlas, por lo que deben ser expulsados del Congreso de los Diputados de forma inmediata", sentenciaron los socialistas.
