La estrategia de oposición continua dibujada por Pablo Casado implica, a veces, soplar y sorber al mismo tiempo. Y es que, fue el líder del PP el que votó en contra del estado de alarma y es el líder del PP el que ahora pide al Gobierno de Pedro Sánchez que “no se puede lavar las manos” y debe controlar a las autonomías ante los rebrotes. Ya apuntó en este sentido el pasado sábado durante la comparecencia en el XV Congreso del PP de la provincia de Alicante; y sus dirigentes le siguen a pies juntillas.

El vicesecretario de Comunicación, Pablo Montesinos, ha criticado al Gobierno de Pedro Sánchez por estar "sin plan y fuera de juego" ante los rebrotes de coronavirus en España.

En este sentido, ha asegurado que el Ejecutivo está "desaparecido" pese a los rebrotes en distintos puntos del país. "¿Cómo es posible que no tenga un plan de respuesta claro y concreto?", se ha preguntado.

Asimismo, ha criticado que Sánchez no haya convocado aún a los presidentes autonómicos, tras las elecciones vascas y gallegas, "tal y como se comprometió". "Hoy habrá muchos españoles que estén estupefactos, y muy preocupados, ante un Gobierno que ni coordina, ni dirige, ni ampara a las comunidades autónomas", ha lamentado.

Montesinos ha insistido en que el PP tiene su mano "tendida para actuar, para trabajar conjuntamente" y ha recordado que hace "ya semanas" que Pablo Casado ha desgranado en el Congreso de los Diputados "un plan B jurídico, con medidas eficaces y ágiles, alternativo al estado de alarma”.

 

Respecto a la votación que se celebrará esta semana de las conclusiones de la Comisión de Reconstrucción, ha asegurado que el Gobierno "aún está a tiempo" de coger la "mano tendida" del PP y de llegar a un pacto sanitario. "Un gran un gran acuerdo Cajal por la Sanidad que la ciudadanía nos reclama", ha precisado.