El PP se ha abierto a abrir un debate sosegado sobre la gestación subrogada siempre y cuando se acepte la premisa de que sea un acto absolutamente altruista. A pesar de que afirman que "la novedad es que no hay ninguna novedad", la formación que lidera Alberto Núñez Feijóo se ha abierto ahora al debate de regular el proceso tras la portada de la revista Hola en la que se podía ver a Ana Obregón saliendo de un hospital en Miami con una niña tras hacer uso de un vientre de alquiler.

Fuentes de la dirección nacional informan que en España es "ilegal" recurrir a un vientre de alquiler y aunque admiten que hay "diferentes sensibilidades", "el interés mercantil no puede formar parte" de un posible debate para regular ka gestación. De esta manera, invitan a que sea "sosegado" pese a que renonocen que no se dan las circunstancias en este momento.

Sin embargo, en la dirección del PP apuntan a "regular cómo inscribir" a la gente que acude al extranjero y acude a los consulados a inscribir a los niños que han ido a recoger después de que una mujer los gestara. Hasta 2019 no había ninguna instrucción al respecto. Justo antes del cambio de gobierno y la llegada de Pedro Sánchez a Moncloa, el Gobierno de Rajoy rectificaba y cierraba la puerta a inscribir en los consulados españoles a niños concebidos en el extranjero por gestación subrogada. Esta premisa no se ha cumplido en 2023 y muchos niños siguen siendo inscritos e insisten en que "una instrucción no soluciona el problema". Prueba de ello es Ana Obregón, que espera en Miami a resolver los problemas legales y volver a España con la menor con pasaporte español.

El Gobierno de Rajoy comentaba que la gestación por sustitución "es una práctica prohibida en nuestro país", y se comprometía a "perseguir" a las agencias "que se lucran conduciendo a cientos de parejas a procrear en terceros países mediante esta actividad ilegal".

El Ministerio de Justicia de 2019 se comprometía a "dar solución a las situaciones de hecho que se hayan creado "atendiendo al interés superior del menor". Estas declaraciones se producían cuando cerca de 30 familias que permanecían en Ucrania a la espera de completar el proceso de inscripción de menores nacidos por gestación subrogada se han encontraban con el nuevo requisito instaurado de presentar la prueba de ADN que certifique que son padres biológicos del menor. Cinco de ellas recibieron la negativa del Consulado español en Kiev para registrar a sus bebés hasta que se revisaran sus expedientes con los análisis de ADN exigidos.

Vientres de alquiler "altruistas"

El PP defiende ahora abrir el debate siempre y cuando se acepte la premisa de que sea una subrogación "altruista". "Estamos dispuestos a hablar de este asunto. Hay casos en España y es una realidad", apuntan las fuentes de la dirección del partido apuntando a que prima lo que dicen sus estatutos. "En el siguiente congreso se debatirá, probablemente antes para llegar al congreso con alguna propuesta", comentan sobre un cambio de postura.

Además, en esta no mercantilización explican que se trata de una transacción directa. "Una cosa es resarcir en el ginecólogo y otra hacer un pago", indican.

Gamarra pide "debate profundo y sereno"

La secretaria general del Partido Popular, Cuca Gamarra, no ha dejado clara la postura de su formación sobre la gestación subrogada y ha advertido de que es un "aspecto complejo que merece debates profundos y serenos", sin "olvidar" que involucra a menores.

"Es un aspecto complejo, que merece de debates profundos y serenos, ya que afecta a muchas cuestiones morales, éticas, religiosas, con muchas opiniones por parte de la sociedad española", ha señalado Gamarra.

Así lo ha manifestado este miércoles la secretaria general del PP en declaraciones a los medios en el Congreso de los Diputados, al ser preguntada por la postura de su partido sobre los vientres de alquiler, después de la decisión de Ana Obregón de ser madre por gestación subrogada en Estados Unidos.

En este contexto, Gamarra ha advertido de que es un tema en el que "no hay que olvidar que hay niños, hay menores, que tienen unos derechos que deben de ser garantizados". "En cualquier caso abordar este tema debe ser siempre en un marco de profundidad y de reflexión serena", ha concluido.

Una realidad en la que existen "opiniones y posiciones diversas"

En sus estatutos, aprobados en el año 2018 cuando aún estaba Mariano Rajoy al frente del partido, la formación destaca que en el ámbito de los vientres de alquiler "se encuentran los niños que llegan en este momento a España y que han nacido por gestación subrogada en otros países", algo que responde a una realidad "sobre la cual existen opiniones y posiciones diversas".

"Por encima de todo, reiteramos que el PP está siempre al servicio de las personas, protegiendo de una manera más especial a las personas vulnerables, siendo los niños y sus derechos una prioridad para nosotros", señalan los populares en sus estatutos.

Los populares apuntan que se trata de una realidad "muy delicada y extremadamente sensible" por lo que entiende que se trata de uno de los asuntos "que requiere un debate en profundidad, serio y sereno".

Un debate que, según añaden, tras escuchar a los expertos tanto desde el ámbito científico, como jurídico y ético, permita "dialogar, debatir y construir juntos un posicionamiento que dé una respuesta clara y de amplio consenso ante un tema tan importante que afecta a la vida, la dignidad humana y a la conciencia de todos".

En 2017 pedían "prudencia" con la gestación porque genera "controversia social" y "discrepancia" en los partidos

El PP indicaba en 2017 que mantenía una posición de "prudencia" con la gestación subrogada y ha recordaba que se trata de un asunto que genera "controversia social" y "discrepancia en muchos de los partidos". Las declaraciones procedían de la dirección del partido de Rajoy ante la proposición de ley sobre gestación subrogada que Cs registró pidiendo una ley "altruista y garantista", no remunerada y regulada por el Estado.

En aquel entonces, el partido que lideraba Albert Rivera planteaba una edad mínima para las madres gestantes de 25 años y que los adoptantes tengan que ser españoles o residentes españoles. En aquel entonces, Pablo Casado, que ostentaba el cargo de vicesecretario de Comunicación, explicaba que el asunto generaba "controversia social" y "una discrepancia en muchos de los partidos", lo que requería de un "estudio en profundidad", también por expertos en la materia.