El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el rey de Marruecos, Mohamed VI, han acordado este jueves poner a sus respectivos ministros a trabajar en concretar una nueva “hoja de ruta” que defina las nuevas relaciones bilaterales. Para escenificar esta reconciliación el jefe del Ejecutivo ha viajado a Rabat tras casi un ño de tensiones, aunque no se desconocen los detalles de la conversación.

Durante la entrevista, Sánchez ha querido "reafirmar" la nueva posición del Gobierno sobre el Sáhara, donde consideran la iniciativa de Marruecos “como la base más seria, realista y creíble” para resolver el conflicto.

Ambos han querido reiterar su “voluntad de abrir una nueva etapa en las relaciones bilaterales basada en el respeto mutuo, la confianza recíproca, la concertación permanente y la cooperación franca y leal”, indica el comunicado marroquí. Sin embargo, el escrito no incluye ni la cooperación en la lucha contra la inmigración ilegal ni  el respeto a la integridad territorial española sobre Ceuta y Melilla como busca España.

Además, han acordado "poner en marcha acciones concretas en el marco de una hoja de ruta que abarque todos los ámbitos de la asociación, y que integre todas las cuestiones de interés común". Asimismo, han tenido ocasión de repasar los diferentes aspectos de interés común en sus componentes político, económico, de seguridad y cultural a la par que Sánchez ha anunciado más noticias en "los próximos días".

Respeta al Congreso, pero se reafirma en la posición del Gobierno

Pedro Sánchez ha dicho este martes que respeta la iniciativa sobre un referéndum para el Sáhara presentada por Podemos, ERC y EH Bildu que ha salido adelante con el voto en contra del PSOE y se ha reafirmado en su decisión de reconocer el plan de autonomía marroquí como la base más realista para solucionar el contencioso.

Así lo ha afirmado en una conversación informal con los periodistas que le han acompañado a su viaje a Rabat, donde en estos momentos se encuentra ya reunido con el rey Mohamed VI en el Palacio Real, quien a continuación le invitará a participar en la cena de ruptura del ayuno por el Ramadán.

"Respeto lo que se ha aprobado en el Congreso", ha afirmado el presidente, que ha defendido el paso que dio con su carta del 14 de marzo a Mohamed VI, en la que afirmó que el plan de autonomía marroquí para el Sáhara es "la base más sólida, creíble y realista" para lograr una solución. "Me reafirmo en que esta es la mejor posición en el interés general de España", ha insistido.

El presidente ha defendido que el PSOE mantiene la misma línea desde hace años, de apuesta por una solución en el marco de la ONU, como se apunta en la proposición no de ley presentada, que ha recibido también el respaldo de PP mientras que Ciudadanos y Vox se han abstenido, pero en ningún caso podía respaldar la exposición de motivos, en la que se criticaba el giro con respecto al Sáhara.

Por otra parte, ha insistido en que con Marruecos hay un "buen acuerdo" para iniciar una nueva etapa en la relación bilateral tras casi un año de crisis bilateral. "Por múltiples motivos no solo el migratorio teníamos que normalizar relaciones", ha sostenido el presidente.