Los Veintisiete miembros de la UE han publicado este domingo su nueva posición común sobre la guerra entre Hamás e Israel; un conflicto marcado en los últimos días por las advertencias del Ejército israelí a la población del norte de Gaza para que abandone sus hogares en dirección sur, en lo que la ONU y la propia Unión Europea consideran una práctica ilegal de desplazamiento forzado.

En su declaración precisan su "condena en los términos más contundentes los brutales e indiscriminados ataques terroristas de Hamás por todo Israel y deplora profundamente la pérdida de vidas".

"No hay justificación para el terror", añaden, al tiempo que exigen a Hamás la liberación inmediata de todos los rehenes" que tiene en su poder, en torno a unas 130 personas, según las estimaciones del Ejército israelí.

A esto añaden, con "contundente énfasis" que "Israel tiene el derecho a defenderse en línea con el derecho Humanitario e Internacional de ataques tan violentos e indiscriminados", y reiteran "la importancia de proteger a todos los civiles en todo momento".

No obstante, la UE insiste en la importancia de "proporcionar ayuda humanitaria urgente" y se declara dispuesta a "seguir respaldando a aquellos civiles de Gaza más necesitados en coordinación con sus aliados". Una de las intenciones primordiales, apuntan es la de garantizar "que las organizaciones terroristas no abusan de esta asistencia".

Por último, los Veintisiete se declaran comprometidos con una "solución duradera y sostenible basada en la coexistencia de dos estados" a través de "revitalizados esfuerzos para reiniciar el proceso de paz en Oriente Próximo".

Una ayuda que no llega 

Mientras, la ayuda humanitaria se queda en Egipto y no llega. El Alto Representante de Política Exterior de la UE, Josep Borrell, ha advertido en redes sociales del "rápido deterioro de la situación humanitaria en Gaza", donde se necesita ayuda humanitaria de forma "urgente".

Dado que debe llegar del exterior, Borrell ha pedido la reapertura de los pasos fronterizos. "Se necesita acción para impedir que mueran más inocentes", ha subrayado.

La agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos, la UNRWA, advertía este fin de semana de que los habitantes de la Franja de Gaza se encuentran en una situación de "vida o muerte" por la falta de agua. En esta línea, recordaba también que hace ya una semana que Israel no permite la entrada de suministros y la planta de agua y sus redes de distribución han dejado de funcionar, por lo que la población se ve obligada a utilizar agua sucia de pozos, con el consiguiente riesgo de enfermedades.

Del mismo modo, desde el pasado 11 de octubre Gaza sufre un apagón eléctrico que también afecta al suministro de agua.

Esto ha llevado al comisionado general de la UNRWA, Philippe Lazzarini, ha solicitar el suministro inmediato de combustible en la Franja con el fin de que sus habitantes puedan beber. "Se ha convertido en una cuestión de vida o muerte. Es una necesidad", ha declarado Lazzarini en un comunicado.

El Gobierno estadounidense, por su parte, ha nombrado al diplomático David Satterfield enviado especial para lograr que la ayuda humanitaria entre en la Franja de Gaza y ha anunciado que se desplazará este mismo lunes a la región.

"La experiencia diplomática del embajador Satterfield y sus décadas de trabajo en algunos de los comflictos más problemáticos será clave en nuestro esfuerzo para afrontar las cuestiones humanitarias en la región, una prioridad para el presidente (Joe) Biden", ha explicado el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, según recoge el citado diario israelí 'Haaretz'.

En particular, trabajará para lograr que la ayuda humanitaria llegue a Gaza "en coordinación con la ONU, Egipto, Jordania, Israel y otros actores regionales", ha apuntado. La vía más clara de entrada de la ayuda humanitaria es el paso de Rafá, que comunica el sur de la Franja de Gaza con Egipto.

Diversas organizaciones humanitarias y agencias de la ONU se han movilizado para enviar ayuda a la Franja de Gaza, ya en situación de crisis incluso antes del inicio de los ataques israelíes, pero Israel ha vetado cualquier entrada de mercancías en la zona, incluidos alimentos, combustible y ayuda humanitaria.

Más de 2.600 víctimas en Gaza 

Hasta el momento, más de 2.600 personas han muerto en la Franja de Gaza por la ofensiva lanzada por las fuerzas de Israel, según el nuevo balance divulgado por el Ministerio de Sanidad gazatí.

En concreto, el régimen de Hamás tiene constancia de 2.670 fallecidos y unos 9.600 heridos.

Más de 150 israelíes retenidos 

Por su parte, el Gobierno de Israel cifra en más de 1.300 las víctimas mortales en suelo israelí por los ataques de Hamás, a las que hay que sumar unas 155 personas que continúan retenidas como rehenes. Un portavoz militar, Daniel Hagari, ha indicado que ya han informado a sus familias. "Sé que cada segundo es una eternidad, (pero) haremos todo lo posible para que sus seres queridos puedan volver a casa", ha prometido, según informa 'Times of Israel'.

Netanyahu ha trasladado a los afectados que su liberación es uno de los objetivos de la ofensiva terrestre que ultima, pero para la que no existe fecha cerrada, comentan algunos familiares al diario 'Haaretz'.