La decisión del presidente francés, Emmanuel Macron, de reconocer oficialmente al Estado de Palestina ha generado una ola de reacciones internacionales, encabezadas por un rotundo rechazo de Estados Unidos e Israel.
El presidente estadounidense Donald Trump ha desestimado por completo el anuncio de Macron, calificándolo como "irrelevante" y sin “ningún tipo de peso”. “Macron es un tipo diferente. Me cae bien. Es un jugador de equipo la mayor parte del tiempo, pero aquí llegan las buenas noticias: lo que él diga no importa”, ha declarado Trump ante la prensa poco antes de partir hacia Escocia. Ha añadido con tono tajante que se trata de una "declaración sin ningún tipo de peso", ha espetado.
La crítica de Trump se suma al rechazo manifestado por el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, quien ha asegurado que la iniciativa francesa "solo sirve a la propaganda de Hamás". En un comunicado, Rubio ha afirmado que “Estados Unidos rechaza enérgicamente el plan de Emmanuel Macron de reconocer un Estado palestino en la Asamblea General de la ONU”.
Este jueves, Macron ha anunciado a través de una carta en la red social X ( antes Twitter) su intención de reconocer formalmente al Estado de Palestina durante su intervención en la Asamblea General de Naciones Unidas en septiembre. Francia se convertirá así en el país número 149 en dar este paso, siguiendo los recientes reconocimientos por parte de España, Irlanda, Noruega y Eslovenia.
Según el mandatario francés, la decisión responde a “un compromiso histórico con una paz justa y duradera en Oriente Medio”. Macron ha justificado el anuncio como un acto político en favor de la solución de dos Estados, en un contexto marcado por el conflicto en Gaza y la crisis humanitaria derivada de la guerra entre Israel y Hamás. Hasta la fecha, 143 de los 193 miembros de la ONU reconocen a Palestina como Estado soberano, lo que representa el 81% de la Asamblea General. Sin embargo, grandes potencias como Estados Unidos, Reino Unido y el resto del G7 continúan negando ese reconocimiento, alineándose con la estrategia diplomática de Israel.
En Europa, España ha liderado recientemente esta iniciativa. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, celebró el anuncio de Macron afirmando que “entre todos debemos proteger lo que Netanyahu está tratando de destruir”.
Duro rechazo de Israel
La reacción israelí no se ha hecho esperar. El ministro de Asuntos Exteriores, Gideo Saar, ha acusado este viernes a Macron de actuar por motivos "publicitarios" y de poner en riesgo la liberación de los rehenes aún en manos de Hamás. En su cuenta de X, Saar ha cuestionado el calendario del anuncio: “¿Por qué el presidente Macron anunció en julio su intención de hacer su anuncio en la ONU en septiembre? ¿Es esto una promoción publicitaria?”
Para Saar, el reconocimiento no solo no contribuye a un acuerdo de paz, sino que logrará "todo lo contrario", lo que, según él, ese "regalo" solo logrará que Hamás "endurezca" sus posiciones en la negociación."Las consecuencias serán la prolongación de la guerra, así como el continuo maltrato a los rehenes y el sufrimiento de la población gazatí", ha dicho el ministro de Exteriores, quien ha sugerido que Macron solo se mueve por intereses personales, según ha escrito en su cuenta de la red social X.
El anuncio de Macron debía haberse producido en junio durante una cumbre internacional auspiciada por Francia y Arabia Saudí en la sede de la ONU en Nueva York, pero fue pospuesto debido a la escalada militar entre Israel e Irán. Con esta decisión, Francia se suma al bloque de países europeos (España, Irlanda y Noruega) que el 28 de mayo de 2024 reconocieron a Palestina en una iniciativa simultánea que fue reprendida desde Israel.