Esa la gran pregunta que hoy día se cuece en todo el país, después que Peter Van Onselem, editor del canal 10 de televisión dijera que, según sus fuentes, un ministro del gabinete de la Coalición conservadora que dirige Australia fuera quien proclamó, a los cuatro vientos, la conducta del jefe del Gobierno federal. Según este ministro, el comportamiento reprobable de Scott Morrison es el de un psicópata.

Las acusaciones, según el editor, se consiguieron a través de textos y mensajes que llegaron a la redacción a partir del año 2019. Además, según las fuentes de información, los mensajes aludían también a Gladys Berejklian, ex mandataria estatal de Nueva Gales del Sur, en el sentido de recriminar a Morrison que fuera persona horrible y persona obsesionada en ganar las discusiones a toda costa a sus opositores políticos.

Sin tiempo que perder, la exmandataria política recalcó que, de ninguna manera, recordaba haber hecho las afirmaciones que pregonó el canal 10 de la televisión australiana.

Valga recordar que la ex mandataria Berejklian dimitió de su cargo el año pasado, después que su pareja estuviera envuelta en un caso de corrupción, cuyas investigaciones fueron demoledoras, tras estar implicado en negocios que le reportaron millones de dólares.

Morrison puso en tela de juicio que hubieran existido las supuestas palabras de la exmandataria política dado que a los dos les unía una buena amistad que había perdurado mucho tiempo.

Por otro lado, tras insinuaciones de los informadores de que Marise Payne, ministra de Defensa y Matt Kean, nuevo tesorero de Nueva Gales del Sur, estarían implicados en filtrar los mensajes, los dos negaron, rotundamente, las versiones aparecidas en los medios.

Ayer, en la comparecencia del primer ministro en la sala del Club de Prensa de la capital de Canberra, Morrison tuvo que lidiar con el editor Van Onselen, del canal 10 de televisión, quien le dijo que habían filtrado mensajes de texto entre un ministro del gabinete liberal de la coalición y el anterior mandatario político de Nueva Gales del Sur.

Mensajes anónimos

A continuación, hoy miércoles por la tarde el editor en el programa de Televisión Australia Today, hizo una aclaración diciendo, que sus informaciones sobre el comportamiento del primer ministro fueron filtradas a través de un ministro federal.

Seguidamente, en ese mismo programa Morrison, dijo textualmente "qué importa lo que diga la gente que escribe mensajes anónimos".

Niega que sea un ministro

En la tarde de hoy, el primer ministro dijo a los medios informativos que la persona que ha filtrado los textos no es un ministro del gabinete federal.

A preguntas de los informadores, sobre si el Gobierno comenzaría investigaciones para descubrir las filtraciones de los mensajes dijo que no daba mayor importancia al asunto.

Un asunto que traerá cola durante los próximos días para conocer, definitivamente, si ha sido un ministro del gabinete federal o alguien que permanece en la sombra por motivos políticos.  

En este contexto, el líder de la Oposición, Anthony Albanese, dijo que el primer ministro tiene un problema recurrente con no decir la verdad. Y puso de ejemplo el viaje que el primer ministro hizo a Hawái en 2019. Un viaje que, según Morrison, había comunicado al líder de la Oposición, extremo que Albanese insiste en negar.