El Gobierno de Pakistán ha rechazado este sábado las críticas pronunciadas por países como Estados Unidos, así como de la Unión Europea y organizaciones no gubernamentales, sobre el desarrollo de las elecciones generales en el país, que han estado marcadas por la tensión, la violencia y el retraso en la publicación de los resultados por los cortes de comunicación ordenados por las autoridades ante la amenaza de posibles atentados. Frente a estas críticas, el jefe del Ejército de Pakistán, el general Asim Munir, ha celebrado el desarrollo de los comicios y felicitado a todos los candidatos en un discurso en el que ha llamado tanto a los políticos como a la población a alejarse de la polarización que ha dominado en particular los últimos años de la vida política del país.
El discurso de Munir ha sido conciliador, en la misma línea que los pronunciados durante los últimos meses por los militares, la institución más poderosa del país, tras unos comicios marcados por la violencia y por la confusión en el recuento, que se han saldado con 44 muertos y más de un centenar de heridos contando la jornada previa a la votación y que auguran, del mismo modo que en las últimas décadas, un complejo futuro político para el país.
Por su parte, el Gobierno de Estados Unidos pidió este viernes a las autoridades de Pakistán que los resultados electorales fueran publicados "completos y puntuales" y que reflejaran fielmente la voluntad del pueblo tras detectar algunas "restricciones indebidas a las libertades de expresión, asociación y reunión pacífica" durante los comicios del jueves. La Unión Europea condenó la violencia registrada en el desarrollo de los comicios, al tiempo que señaló que los candidatos no concurrieron con igualdad de condiciones y ha pedido a las autoridades que investiguen las irregularidades denunciadas.
"Estamos sorprendidos", aduce por contra el Ministerio de Exteriores pakistaní en un comunicado, "por el tono negativo de algunos de estos comentarios, que ni toman en cuenta la complejidad del proceso electoral ni reconocen el libre y entusiasta ejercicio de su derecho a voto efectuado por decenas de millones de pakistaníes". La cartera exterior también afea que estas declaraciones "ignoran el hecho innegable de que las elecciones en Pakistán se han desarrollado con éxito y en paz, al tiempo que han lidiado con graves amenazas a la seguridad procedentes, sobre todo, de grupos terroristas patrocinados por fuerzas extranjeras".
Apagones, muertos y heridos
En el mismo sentido, el Gobierno insiste en que el apagón del servicio de telefonía se debió a la necesidad de "evitar incidentes terroristas durante la votación" y que en modo alguno ocurrió un 'apagón' generalizado del acceso a Internet, como apareció en algunos medios. Fue el titular de Interior del país, Gohar Ejaz, quien defendió esta decisión tras recordar que en la jornada previa a la votación del jueves murieron 28 personas y otras 64 resultaron gravemente heridas en incidentes terroristas. En total, 44 personas han fallecido y otras 118 han resultado heridas contando los incidentes violentos tanto del miércoles como de la jornada electoral.
Por su parte, el principal partido de la oposición, el Movimiento para la Justicia de Pakistán (PTI) que lidera el encarcelado Imran Jan es, por ahora y a falta de la publicación de los resultados finales, el partido más votado y posiblemente hará falta que su gran rival, la Liga Musulmana de Pakistán - Nawaz, del ex primer ministro Nawaz Sharif, tenga que formar coalición.
Jan, también ex primer ministro y ahora en la cárcel tras varias condenas por corrupción y abuso de poder, lleva meses acusando al Ejército de orquestar una conspiración en su contra para expulsarle de la vida política, algo que los militares han desmentido en muchas ocasiones. En medio de este caos político, militar y social, el general paquistaní ha elogiado la celebración del proceso electoral. "Las elecciones y la democracia tienen el objetivo de servir al pueblo de Pakistán y no son un fin en sí mismas. La nación necesita una mano estable y un toque curativo para dejar atrás unas políticas de la anarquía y de la polarización que no se corresponden con un país progresista", ha estimado Asim Munir.
Del mismo modo, el general ha felicitado al personal de seguridad, a los medios de comunicación y a la Judicatura por la celebración de un proceso de semejante envergadura, caracterizado por una "participación libre y sin obstáculos" por parte de una población "que ha demostrado su compromiso con la democracia". Con todo, el general ha incidido en que estas elecciones "no son un juego de suma cero" donde "la gente gana o pierde", sino que han de ser un "ejercicio para determinar el mandato del pueblo" y ha solicitado a los políticos que hagan un ejercicio de concordia. "Ahora les toca responder a la voluntad del pueblo con madurez política y unidad", ha sentenciado.