En una reciente conferencia en São Paulo, el expresidente del Gobierno español, José María Aznar, volvió a demostrar su afinidad con el alarmismo político, esta vez al advertir que si Israel no vence en Oriente Medio, la "próxima batalla será en las costas del sur de Europa". Con este tipo de afirmaciones, Aznar parece insistir en una visión simplista y maniquea de un conflicto complejo, donde reducir la cuestión a una confrontación entre el bien (Israel) y el mal (Irán y sus aliados) puede ser no solo inexacto, sino peligrosamente polarizador.

"Si Israel fracasase, habría zonas del mundo muy comprometidas. Si Israel no gana, la próxima batalla no será en Oriente Medio, será en las costas del sur de Europa y eso es algo que estratégicamente tenemos que tener en la cabeza", afirmó el exmandatario español, quien subrayó la relevancia del conflicto más allá de las fronteras de Oriente Medio. Según Aznar, la estabilidad de Europa podría estar en juego si el Estado de Israel no logra sus objetivos en la región.

Esta retórica simplista evoca los fantasmas del "choque de civilizaciones", una narrativa que él ha mantenido desde sus años en el poder, pero que ha demostrado ser ineficaz para abordar los matices y las realidades del siglo XXI.

Aznar también señaló que Irán representa "el gran riesgo" en Oriente Medio y advirtió sobre su influencia en la región. "Irán es el país que mantiene a Hamás en Gaza, a Hezbolá en el Líbano y a los rebeldes hutíes en Yemen", indicó. En su intervención, Aznar cuestionó la viabilidad de alcanzar acuerdos con actores como Hamás y Hezbolá, preguntándose: "¿La situación de Israel mejora si Hamás sigue en Gaza? ¿Qué tipo de acuerdo se puede hacer con Hamás o si Hezbolá sigue disparando cohetes desde el Líbano?".

En cuanto al papel de Estados Unidos en el conflicto, Aznar fue crítico con las políticas de disuasión hacia Israel, señalando que Washington debería enfocar sus esfuerzos en los enemigos de su aliado histórico. "No digo que no tenga que hacer cierta presión, pero lo normal es disuadir a tus enemigos, no a tus amigos", afirmó, refiriéndose a las constantes advertencias de Estados Unidos hacia Israel para limitar sus operaciones militares en Gaza y Líbano.

Aznar también vinculó la actual escalada militar con el contexto electoral en Estados Unidos, sugiriendo que Israel está actuando en este momento debido a la incertidumbre sobre el resultado de las elecciones presidenciales estadounidenses. "Israel se está moviendo militarmente porque entiende que es el momento adecuado ante la proximidad de las elecciones en Estados Unidos", explicó, mencionando que el resultado de los comicios, con Kamala Harris por los demócratas o Donald Trump por los republicanos, podría alterar el apoyo tradicional de Estados Unidos a Israel.

Por último, Aznar lamentó que la intensificación del conflicto haya interrumpido lo que él describió como "un proceso de reconocimiento muy importante de países árabes con Israel", haciendo referencia a los acuerdos recientes que Israel ha logrado con algunos países árabes, acuerdos que, según él, podrían haber avanzado aún más si no fuera por el aumento de las tensiones en la región.

La intervención de Aznar en São Paulo refleja una postura que, más que contribuir a una solución pacífica y equilibrada, insiste en una visión parcial y militarizada del conflicto. Frente a un panorama global que demanda diálogo, cooperación y soluciones diplomáticas, el exmandatario español sigue atado a una retórica que promueve la confrontación y el miedo.

Ascienden a cerca de 41.650 los muertos y unos 96.500 los heridos por la ofensiva de Israel en Gaza

Las autoridades de la Franja de Gaza, controladas por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), han elevado este martes a cerca de 41.650 los palestinos muertos y a alrededor de 96.500 los heridos a causa de la ofensiva desatada por Israel contra el enclave a raíz de los ataques ejecutados el 7 de octubre por el grupo islamista y otras facciones palestinas.

El Ministerio de Sanidad gazatí ha especificado en un comunicado en su cuenta en Telegram que hasta la fecha se han confirmado 41.638 fallecidos y 96.460 heridos, incluidos 23 "mártires" y 101 heridos a causa de cuatro "masacres" cometidas por las tropas israelíes durante las últimas 24 horas.

Sin embargo, ha recalcado que "aún hay varias víctimas entre los escombros y tiradas en las calles, sin que las ambulancias y los equipos de Defensa Civil puedan llegar a ellas", por lo que la cifra de fallecidos podría ser más elevada.