La canciller alemana, Angela Merkel, ha pronunciado su tradicional discurso de Fin de Año, esta vez muy marcado por la pandemia mundial del coronavirus. Alemania notificó ayer más de 1.000 fallecidos en un día y una cifra de contagios superior a los 25.000 casos, es por ello que ha destacado en sus palabras que aún queda "bastante tiempo" hasta que la pandemia se pueda dar por concluida y que aún quedan por vivir "tiempos duros".

"La pandemia de coronavirus ha sido y es una tarea que sucede una vez en un siglo en los ámbitos político, social y económico. Es una crisis histórica que ha golpeado a todos mucho y, a algunos, demasiado", señala Merkel. Asimismo, reconoce el "miedo existencial" que están viviendo los ciudadanos que han perdido sus empleos o negocios.

Sin embargo, uno de los puntos más destacables de su discurso ha sido la llamada de atención que ha hecho para referirse a los negacionistas del virus, tachándolos de no solo ser "falsos y peligrosos, sino también cínicos y crueles". 

A nivel político, ha destacado que en las próximas elecciones federales alemanas de 2021, no se presentará como candidata tras liderar el cargo desde 2005.