Como la alegría va por barrios, en el ‘barrio’ de Castilla y León destaca la alegría del secretario general de los socialistas, Luis Tudanca, que comparecía esta mañana, tras la declaración institucional de Pedro Sánchez, asegurando que el presidente del Gobierno “ha acertado” y que “es una magnífica noticia que se quede” a consecuencia de una “necesaria reflexión: Primero el país, luego el partido y finalmente uno mismo. Y eso no debe significar nunca que detrás de la política de servicio”.

En el otro extremo del tablero, el vicepresidente Juan García-Gallardo, de Vox, que participaba en la clausura del campeonato nacional de legumbres, jaleaba a “quienes ejercen el periodismo libre y los jueces independientes que quieren investigar casos de corrupción política”, que, según cree, “van a necesitar unos buenos platos de judías del Barco de Ávila”.

Tudanca: “Desterrar los insultos”

Desde el PSOE, Tudanca rotula que el presidente, “a pesar del dolor”, los ataques e insultos, este lunes “ha vuelto a anteponer el interés general” al dolor que sufren él y su familia, lo que considera que le honra y algo que al PSOE de Castilla y León le hace sentir orgullo. No obstante, entiende que estos cinco días “no deben quedarse ahí”.

“Debe servirnos a todos y a todas, al conjunto del país, a los ciudadanos, a los servidores públicos, a los medios de comunicación y también a la oposición de que la política es algo mejor de lo que algunos se empeñan en demostrar últimamente, de que el servicio público merece la pena y de que debemos hacer todo lo que esté en nuestra mano por dignificarlo cada día”, subrayó.

Ahondando en los mensajes del propio Sánchez, Tudanca continuó señalando que “no podemos permitir de ninguna de las maneras que algunos se empeñen en destruir una democracia que costó mucho levantar, que costó mucho traer a este país, que nos ha traído grandes cosas y que se empeñan en socavar sus cimientos”.

El líder socialista en Castilla y León entiende que nada puede seguir igual, “ni en el gobierno ni en el partido, en los medios de comunicación ni en la ciudadanía. Esta reflexión debe servirnos para que cambie algo en este país, para que desterremos entre todos los insultos, la polarización, la crispación, los ataques personales, la deshumanización del adversario, la consideración de que cualquier rival político es un enemigo. Esto tiene que terminar”.

No obstante, Tudanca responsabiliza de todo ello a “quien lo ha hecho, quien ha convertido la política en un lodazal y quien está dispuesto a todo para conseguir el poder. Y es la derecha, indistinguible de la extrema derecha”.

Judías y lentejas contra la “deriva tiránica”

A tenor de las inmediatas reacciones de uno y otro lado, no obstante, no parece que el cambio de trayectoria en la polarización política esté próximo, puesto que poco después salía a la palestra Juan García-Gallardo, desde uno de los eventos gastronómicos a los que habitualmente asiste, que ha aprovechado para valorar la decisión del presidente del Gobierno.

“Unos buenos platos de judía del Barco de Ávila, de alubia de la Bañeza o de lenteja de Tierra de Campos o la Armuña”, ha recetado Gallardo a lo que denomina “periodismo libre” y “jueces independientes” para que puedan seguir investigando la corrupción, “no desfallecer y ejercer bien su tarea ante la deriva tiránica que estamos viviendo en España”.

El vicepresidente de ultraderecha afirma que “no hubo sorpresa en Las Gaunas, sabíamos que este señor no se iba a ir ni iba a renunciar voluntariamente al poder, y lo lamentable es que haya utilizado la figura del rey y también a su propia familia para alimentar ese relato de victimismo al que nos tienen acostumbrados también en Castilla y León”.