El ministro de Economía y Competitividad de España, Luis de Guindos. EFE

 

 


Siempre, en cualquier orden de la vida, se puede ver la botella medio llena o medio vacía, pero es curioso el afán del Gobierno y de las secciones de Economía de su prensa afín (la de papel es toda) de vender como logros estratosféricos lo que no dejan de ser malos datos. El bono español, la calificación de buena o mala solvencia, que otorgan las agencias de calificación obtuvo su mejor nota en toda la historia en 2.007 y 2.008, la triple A, solo otorgada a las economías más solventes. Pero gobernaba Zapatero y ese logro jamás ocupó un titular, en la prensa de derechas por razones obvias y en El País tampoco por otra razón obvia: la animadversión personal de Cebrián a Zapatero.

Rajoy heredó una calificación de doble A y la bajo seis puestos
Incluso con la crisis golpeando con toda su crudeza la nota de la deuda española era muy, pero que muy superior a la triste B que ahora enloquece de gusto al ministro de Economía, Luis de Guindos. Tras los recortes de Zapatero en ese año las agencias de raiting bajaron la nota de la triple A (la máxima que se puede obtener) a AA+ y posteriormente a AA sin el signo positivo, en el 2011 siguió en doble A pero con perspectiva negativa y Rajoy la heredó en A+, es decir en seis niveles por encima de la actual. En dos años de Gobierno la calificación no hizo más que bajar y cerró 2012 en BBB-, a un escasísimo paso del bono basura que es cuando un país ya no se puede financiar y los mercados consideran que está en bancarrota.

Durante todo el 2013 la calificación se mantuvo en BBB-, a pesar de que el Gobierno ya hablaba de recuperación y fin de la crisis, y ahora Moody´s le ha otorgado una nota de Baa2, lo que significa que aún no ha consolidado ni siquiera la triple B y mucho menos la triple B positiva.

Moody's  alaba la reforma laboral y de pensiones
Para subir medio escalón, que significa alejarnos dos pasos de lo peor de lo peor, Moody´s elogia dos cuestiones: la durísima reforma laboral que ha dejado a los trabajadores sin derechos y ha ido acompañada de una devaluación salarial sin precedentes, y la reforma de las pensiones, que consolida la jubilación a las 67 y que es mucho más dura que la que hizo Zapatero y que en su día el PP criticó y votó en contra. No se recuerda mayor cinismo político.

Dice Moody´s que la economía española mejora más rápido de lo previsto, a pesar de que el paro no baja del 26% y la deuda pública es la más alta en 150 años, el 98% del PIB.

Rajoy es capaz de presumir
Las lecturas del informe de Moody´s en la prensa son sorprendentes. El Mundo, con nuevo director, no duda en afirmar que es un espaldarazo a Rajoy del que podrá presumir en el Debate del Estado de la Nación. ¿Presumir de tener una calificación Baa2?, la derecha española es capaz de eso y mucho más.Ningún primer ministro europeo sería capaz de hacerlo sin provocar las carcajadas de los economistas independientes, pero esto es España y Rajoy manda mucho.

Otra cosa es que la oposición se lo consienta, pero dudo mucho de que Rubalcaba sea capaz de recordar que con Zapatero, y fue su vicepresidente, se logró la máxima nota posible (si la hubiera obtenido Felipe González a buen seguro que Rubalcaba si lo recordaría).