El PP valenciano podría caer a la cuarta posición en unas hipotéticas elecciones autonómicas, según los últimos sondeos de ElectoMania. La popularidad de Carlos Mazón está en caída libre tras su gestión de la crisis de la DANA, y pasaría de ganar las elecciones y haber podido formar gobierno a un posible cuarto lugar muy doloroso para el Partido Popular en una de sus regiones feudo.
En concreto, según el último ElectoPanel, fechado a 27 de febrero, el PSOE ganaría las elecciones valencianas con un 27,9% de los votos, que le valdría para cosechar 29 escaños, mientras que el PP aún mantendría el segundo lugar, pero en una tendencia tan descendente que Compromís y Vox podrían sobrepasarle. La encuesta entrega a los progresistas un 22% de los votos y 22 diputados y el 21,9% de los sufragios y 23 asientos a la ultraderecha, muy cerca del 23,3% y 25 parlamentarios que obtendría un Partido Popular que no estaría lejos de ser sobrepasado por estas formaciones.
La gestión de la crisis de Carlos Mazón, caracterizada por los giros discursivos, la opacidad en la información y unas cuestionables salidas al paso durante meses le estaría pasando una factura que se vería reflejada en las urnas. El político 'popular' se ha negado a dimitir y la dirección nacional del partido ha mantenido su respaldo, en una decisión que podrían aquejar cuando la ciudadanía ejerza su derecho al voto.
Quinta manifestación contra Mazón en cuatro meses
A su vez, este sábado las calles de Valencia se han vuelto a llenar por quinta vez para protestar por la gestión de la DANA del pasado 29 de octubre por parte del presidente de la Generalitat Valenciana. Sin embargo, esta vez ha sido diferente, pues es la primera movilización después de que, tras cuatro meses de bandazos, se haya conocido la verdad: Mazón llegó al Cecopi a las 20:28 horas, tres horas después de que este arrancara, 16 minutos después de que se diera la alarma a los valencianos y en un momento en que la mayor parte de las 227 víctimas mortales de las inundaciones ya habían perdido la vida.
Las imágenes, difundidades este jueves por la Generalitat, dejan al president en su posición más delicada desde que sucedió la tragedia. Ya no tiene dónde escudarse y su credibilidad política se ha terminado. Ha quedado demostrado que, más allá de no estar disponible, mientras muchos ciudadanos de la región que dirige lo han perdido todo, él ha mentido semanas y semanas sobre qué fue lo que hizo durante las horas en las que l'Horta Sud se inundaba. Desde su comida en 'El Ventorro' con Maribel Vilaplana hasta su llegada al Cecopi hay un vacío que llena de indignación a los valencianos, quienes han vuelto a responder en las calles de su ciudad.