Fumata blanca en Moncloa tras dos días de intensas negociaciones. PSOE y Sumar han alcanzado un acuerdo para prorrogar el escudo social, el octavo desde 2022. Los socios de la coalición tenían en la bonificación al transporte y el gravamen a la banca y las energéticas un escollo que les impedía avanzar. Los socialistas abogaban por delimitar las ayudas al transporte a jóvenes y parados, mientras que los magentas buscaban más transversalidad en la medida. Finalmente, se ha sellado con la extensión de las rebajas para el próximo año. Finalmente, hubo quórum en cuanto a los gravámenes a la banca y a las energéticas, ambos adquieren un carácter permanente. 

Noche larga y de cafés en el Palacio de la Moncloa. Los equipos negociadores se toparon con dos agujeros negros para sacar adelante el octavo decreto ómnibus para amortiguar los efectos de la guerra de Ucrania. Las bonificaciones al transporte y los impuestos a la banca y a las energéticas dejaban algunos flecos en escudo social, a escasas 24 horas de la celebración del último Consejo de Ministros de 2023 y, por ende, de su aprobación. Las posturas estaban alejadas, hasta que el PSOE y Sumar han hallado un punto de equilibrio para mantener el paraguas abierto.

El encontronazo en términos del transporte público se circunscribía al radio de acción de las subvenciones. El ala socialista abogaba por meter ligeramente la tijera y reducir la cobertura de las ayudas a menores de edad, jóvenes y desempleados. En frente, los magentas, encabezados por la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, apostaban por un modelo de mayor transversalidad y ambición para que toda la población, sin excepciones de ningún tipo, se beneficiaran de las rebajas en el transporte público.

Ayudas para todos

Así las cosas, a pesar de las reticencias iniciales, los socialistas han aceptado la propuesta de Sumar. Por lo tanto, las reducciones en el precio de los abonos multiviaje se mantendrán como hasta ahora. Es decir, la bonificación del Estado será de un 30% siempre que el resto de administraciones se comprometan a incrementar esa rebaja hasta el 50%. Nada cambia, pues, de cara al próximo curso en este campo.

Por otro lado, tampoco decaerán las ayudas relativas al resto de los transportes públicos de titularidad estatal. De este modo, se aplicarán los descuentos habituales hasta la fecha en trenes de Media Distancia de Renfe, Cercanías y Rodalies, así como en las líneas de autobús de competencia estatal. El Ejecutivo incluyó en su boceto presupuestario para el ejercicio 2024 una dotación de 1.440 millones de euros para la subvención del transporte público, incluyendo la gratuidad de trenes y autobuses y las ayudas a las comunidades autónomas.

Banca y energéticas

Tampoco cambia el gravamen a la banca, otro de los escollos en la negociación junto al impuesto a las energéticas. El primero de ellos ha prosperado, a su manera, mientras que el segundo se queda en el camino. No ha habido acuerdo entre el ala socialista y Sumar para incluirlo en el decreto anticrisis. El tributo temporal a la banca grava al 4,8% los intereses y comisiones de todas las entidades que facturasen más de 800 millones de euros en 2019, afectando asimismo a la actividad que las entidades desarrollen en España.

Por su parte, el gravamen a las energéticas engloba al 1,2% sobre el importe de la cifra de negocio de estas compañías que facturasen más de 1.000 millones de euros en 2019. Quedaban fuera de la facturación del impuesto los ingresos derivados de las actividades reguladas. Así, este tipo impositivo no afectaba a los ingresos donde el suministro fuera a precio regulado, como es el caso del PVPC de electricidad, la tarifa de último recurso de gas, el GLP envasado y también el GLP por canalización.

En cualquier caso, el acuerdo de los socios de la coalición fija la revisión de los gravámenes con el fin de readaptarlos y mantenerlos toda vez expire su periodo de aplicación actual, con el objetivo de que sendos sectores sigan contribuyendo a la justicia fiscal y al sostenimiento del Estado de bienestar. El propio Pedro Sánchez confirmó en recientes declaraciones que el Ejecutivo trabajaba en el “rediseño” del impuesto extraordinario a las energéticas.

Acuerdo con el PNV

En materia impositiva, el Ejecutivo ha acordado con el Partido Nacionalista Vasco (PNV) integrar estos gravámenes en el régimen foral vasco y navarro, así como la ampliación del contrato de relevo. Moncloa da respuesta a una petición que los jeltzales formalizaron antes de la investidura de Pedro Sánchez. No obstante, además de las transferencias de estos tributos, también se ha cerrado un pacto para la creación de un incentivo para el sector energético por las inversiones estratégicas que se realicen ante la posibilidad de una “ralentización” del gasto en transición ecológica.

Sumado a todo esto, la fuerza nacionalista ha cerrado con el Gobierno la prórroga del contrato de relevo para la industria en 2024, que causa una incidencia especial en el sector de la automoción. De este modo, se facilitará el rejuvenecimiento de las plantillas y la formación de los nuevos trabajadores y jóvenes.