Alberto Ruiz-Gallardón durante su ponencia en el congreso 'Católicos y Vida Pública'
El exministro de Justicia Alberto Ruiz-Gallardón ha protagonizado un acto público por primera vez desde que dimitiera al ver frenado su reforma del aborto, y como explicó ELPLURAL, lo ha hecho en un acto lleno de significación: un foro cívico-político ultracatólico y de la mano de Benigno Blanco, que ha convocado una manifestación contra el Gobierno de Rajoy el próximo 22 de noviembre.
El discurso que dejó vacante Mayor Oreja
El discurso esgrimido por Gallardón este viernes en el Congreso Católicos y Vida Pública organizado por la Asociación Católica de Propagandista ha recordado a aquellos con los que en este mismo foro y otros similares Jaime Mayor Oreja consiguió pastorear durante años el sector democristiano del PP.
“Invierno demográfico”
El exministro ha disertado sobre la importancia de la familia apoyándose en un editorial de ABC para advertir del “invierno demográfico” que se cierne sobre Europa y decir que no se trata de un “discurso catastrofista” sino la realidad con un rápido envejecimiento de la población y “desestructuración social”. Citó datos del Instituto de Política Familiar para decir que “en una hora se producen más de 150 abortos en Europa” o que en España caen los matrimonios y es uno de los países en los que se registran más divorcios.
“Asco” ante la retirada de su proyecto
Al final de su intervención, Gallardón subrayó los dos puntos que le parecen más graves de la actual ley del aborto: que “se permite a las menores abortar sin informar a los padres” y que “la malformación” era el supuesto que más rechazo encontraba en la opinión pública a la hora ser abolido. Sobre su salida del Gobierno apuntó que “no hay conservación de puesto ninguna que justifique negar el derecho a la vida” y preguntado por las razones de la retirada de su declaró: “No me importa que sea por un lobby económico o por interés electoral, lo único que me da es asco”.
“¿Su última participación? No lo admitimos”
“Es la primera vez que hablo desde que dejé el Gobierno y la última en mucho tiempo”, concluyó el exministro no sin antes agradecer a los propagandistas católicos que con su labor durante estos años “han plantado una semilla que en el futuro seremos capaces de que dé sus frutos”. Blanco le demostró su afecto y le corrigió: “¿Cómo que va a ser su última participación en mucho tiempo? Eso no lo admitimos”.