Si alguno pensaba que tras la dimisión forzada de Pablo Casado y la posterior llegada de Alberto Núñez Feijóo al liderazgo del Partido Popular, los populares iban a optar por un perfil más moderado, alejándose de los postulados de la extrema derecha, el dirigente gallego ha tardado poco en confirmar que la moderación no entra, al menos de momento, en los planes de Génova, 13.

Prueba de ello son las declaraciones que ha realizado este domingo el propio Feijóo, acusando al PSC de utilizar a los catalanes para que Pedro Sánchez prolongue su presidencia. “El pacto de dependencia con ERC está llegando demasiado lejos. Yo comprendo que el señor Sánchez sin ERC no es presidente del Gobierno, y por tanto el señor [Salvador] Illa tiene que avalar al señor Aragonès para que el señor Sánchez siga siendo presidente del Gobierno de España”, ha subrayado el líder popular durante la clausura del XIII Congreso Provincial del PP en Lleida, en el que ha estado acompañado por el presidente del PP catalán, Alejandro Fernández.

“Y por tanto”, ha seguido denunciando Feijóo, “el PSC está utiliza a los catalanes para que el PSC y el PSOE, que son lo mismo, puedan gobernar en España”. Unas palabras del líder del PP que llegan pocos días después de que la formación republicana informara de que no tenían ninguna intención de presentar enmiendas a la totalidad de los Presupuestos Generales del Estado (PGE).

“Entre las cuentas públicas y los cuentos hay una gran diferencia”

Y precisamente sobre los PGE, Feijóo ha aprovechado su presencia en Lleida para volver a exigir “un mínimo sentido de Estado” a Sánchez y retirar su proyecto de presupuestos para el año que viene. “Vivir del postureo es mucho más fácil que vivir de las cuentas públicas. Entre las cuentas públicas y los cuentos hay una gran diferencia y nosotros venimos a hablar de cuentas. Que el gobierno siga hablando de cuentos”, ha subrayado.

De esta manera, y siguiendo con su postura crítica, Feijóo ha afirmado que Sánchez tenía en su mano la posibilidad de elegir entre “unos presupuestos para atajar la crisis económica, energética y la inflación que tiene España o elaborar unos para atajar la crisis permanente que tiene en su gobierno, entre sus socios”. “Ha elegido lo segundo”, ha lamentado.

“El objetivo no es que las cuentas públicas mejoren a las familias, que haya más trabajo, más competitividad. No, no, el objetivo es disparar el gasto sin ingresos y dejar una enorme deuda, no solo a los que hoy somos adultos, ni siquiera a nuestros hijos, sino a nuestros nietos”, ha seguido criticando, asegurando que otro de los objetivos de los PGE es “tener contento a los socios” y así “poder permanecer unos meses más como presidente”.

Asimismo, el dirigente popular también ha vuelto a mostrar públicamente su desconfianza en las previsiones de crecimiento con que se encaran estas cuentas. “El cuadro macroeconómico que lleva pintando Sánchez nos ha mentido siempre. ¿Hay algún motivo para creer que esta vez el presupuesto de 2023 va a ser real, cuando los datos anteriores fueron siempre irreales? La respuesta es que no", ha apostillado.

También ha reprochado textualmente a Sánchez degradar las instituciones, con varios ejemplos: los motivos para cesar a la directora del CNI y al director del INE; la gestión del CIS, y haber "tomado" el control de Indra y de RTVE.

“Humildad” del PP para ser ambiciosos en Cataluña

Por último, Feijóo se ha pronunciado sobre la precaria situación en la que se encuentra el PP en Cataluña, donde solamente tienen tres escaños, situándose prácticamente como una formación residual. En este sentido, el líder gallego se ha mostrado convencido de que si los suyos son capaces de garantizar a los catalanes lo que el PSC no les asegura, volverán a conectar con los votantes, aceptando con “humildad” que hasta ahora no han sabido hacerlo.

Por todo ello, ha pedido a su propio partido que acepte también con humildad no haber conectado con la ciudadanía "ya sea en Lleida, Cataluña u otros lugares" donde haya sido así, en vez de buscar causas externas.

Además, ha dicho que su partido tiene tres prioridades irrenunciables: rigor para decir la verdad; respeto a las instituciones gobernando o no; y centrarse en los intereses de la gente en vez de discutir con el rival político, para "no acrecentar el problema".