La diputada del PP por Asturias, Esther Llamazares, ha lanzado un grave bulo en el pleno municipal del Ayuntamiento de Avilés de este viernes. Durante su turno de palabra, la concejala y portavoz municipal 'popular' ha asegurado que en el Congreso de los Diputados hay electos "terroristas que mataron en este país", en clara referencia a EH Bildu.
En su intervención, Llamazares ha acusado constantemente a los concejales socialistas y al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al tiempo que ha pedido al resto de ediles que "no genere odio de forma permanente" a pesar de las palabras que acababa de pronunciar.
Sus palabras textuales han sido las siguientes: "Recuerden cuando digan, según qué cosas, que víctimas todos, que cuando sueltan esas palabras grandilocuentes de ataque acuérdense, ustedes, que son muy de entender a otras sociedades, que tenemos en el Congreso de los Diputados sentados a terroristas, gente que apoyó el terrorismo, gente que mató en este país. Fijénse ustedes que no nos andaban cerrando el paso hoy por los países del mundo porque todos no éramos ETA, no lo consideraba todo el mundo que fuésemos ETA". La alusión es clara: Llamazares se refería a EH Bildu y sus diputados. Cabe recordar que, a pesar de su constante e interesada utilización política, ETA lleva inactiva más de 15 años y ningún miembro de EH Bildu está condenado por la justicia por ninguno de los asesinatos de la banda terrorista.
"Igual que no todo el mundo considera que tenemos un presidente del Gobierno que está provocando realmente graves problemas nacionales e internacionales y no todos somos Sánchez", ha añadido en sus críticas a Sánchez, antes de terminar: "Con lo cual, no hagamos todo de todo y vamos a solidarizarnos con todas las víctimas y si es posible a no generar odio de forma permanente".
Este bulo forma parte de la fuerte campaña de desprestigio que está poniendo en marcha la derecha contra el Gobierno: la DANA, los incendios, el debate político diario... Nada que no sea ya habitual. No obstante, es de recibo decir que nunca antes se había llegado a estos extremos en una región como Asturias, comparando diputados electos con asesinos terroristas.
